Intervención de la Embajadora de Marruecos en Colombia, Farida Loudaya, durante una recepción diplomática en Bogotá, con ocasión de la celebración del Décimo octavo aniversario del acceso al Trono de Su Majestad el Rey Mohammed VI.
La Embajadora de Marruecos en Colombia, Farida Loudaya, ofreció una recepción en honor al Trono de su majestad Mohamed VI, a la cual asistieron diferentes cuerpos diplomáticos y consulares de Colombia, funcionarios estatales, congresistas, empresarios, industriales y representantes de diversos medios de comunicación.
La reunión que fue un éxito total fue escenario de algunas propuestas para la integración de Colombia y Marruecos, en diversas áreas, como la económica, social, educacional y turística.
«Confío en que el futuro depare para el pueblo hermano de Colombia, mucha paz y mucha prosperidad. Estoy segura de que un País que ha regalado a la humanidad grandes sabios y grandes intelectuales, sin olvidar el Premio Nobel de la Paz, podrá aportar mucho al entendimiento, a la convivencia y a la paz, no solamente en América Latina, sino que en todo el mundo», fue uno de los mensajes de la Embajadora, Loudaya.
El siguiente es el discurso pronunciado por Su Excelencia la Señora Embajadora del Reino de Marruecos en Colombia, Farida Loudaya, con ocasión de la celebración del Décimo octavo aniversario del acceso al Trono de Su Majestad el Rey Mohammed VI.
Querido amigos,
El día de hoy celebramos la Fiesta del Trono, que conmemora este año, el Décimo octavo aniversario del acceso al Trono de Su Majestad el Rey Mohammed VI.
Permítanme, antes de todo, expresarles mi profundo agradecimiento, en mí nombre propio y en el de los funcionarios de esta Embajada, por su participación con nosotros, en este importante evento.
Para mí es un día muy especial. Es la primera vez que celebro nuestra Fiesta Nacional como Embajadora de Su Majestad el Rey en la República Hermana de Colombia. Un país por el que siento una gran consideración, un auténtico aprecio y mucho cariño.
He empezado mi misión como Embajadora de Su Majestad El Rey en diciembre del 2016, en un momento histórico y de transcendental importancia para el presente y el futuro de Colombia.
Para Marruecos, la paz de Colombia es más que unos acuerdos firmados. Es un modelo que nos inspira y nos anima a reflexionar, para resolver otros conflictos, en otras regiones del mundo. Con la firma de este histórico acuerdo, se abre un nuevo capítulo completamente portador de un futuro prometedor de paz, estabilidad, esperanza y armonía.
Por eso, quisiera aprovechar esta ocasión para reiterar nuevamente, el apoyo y respaldo del Reino de Marruecos a este proceso, especialmente, en esta etapa del post-conflicto.
Señoras y Señores,
En este día tan especial para nosotros, cabe recordar la trayectoria emprendida desde 1999, por Su Majestad el Rey Mohammed VI, que ha posibilitado que el Marruecos de hoy, sea un país estable, emergente y moderno.
Marruecos es un país árabe y africano. Un país que se caracteriza sobre todo, por su riqueza y su diversidad cultural que le dotan de una autenticidad única y privilegiada, de la cual, saca su fuerza, su dinamismo y su fuente inagotable de apertura y convivencia con las demás culturas y religiones.
Un país multicultural donde se respeta la libertad de culto y donde los valores y principios universales de tolerancia, sana convivencia y respeto al prójimo, se imponen dentro de una sociedad, en constante evolución. Todo ello, en un contexto regional e internacional de grandes retos y complejos dilemas.
Los 18 años del Reinado de Su Majestad el Rey Mohammed VI que celebramos juntos esta noche, han sido testigo, de muchos logros, sobre todo, a nivel económico y social donde emprendemos saltos significativos en materia de desarrollo, crecimiento y apertura.
Marruecos ha conseguido modernizar los sectores tradicionales como: la agricultura, pesca y minería y los sectores innovadores como: las energías renovables, la logística, la industria de automoción y aeronáutica y los servicios.
Los grandes proyectos del Reino son el reflejo de firmes apuestas: aceleración industrial, alta tecnología o energía verde que se plasma en la realización de la planta solar más grande del mundo, y de uno de los parques eólicos más grandes del planeta.
Marruecos como bien saben, ha sido el anfitrión de la Conferencia Mundial sobre el Clima, COP22, que tuvo lugar en la ciudad de Marrakech, en noviembre del 2016. Una cumbre, que ha logrado numerosos compromisos en favor de la lucha contra el cambio climático y el desarrollo sostenible.
Señoras y Señores,
El Reino de Marruecos y la República de Colombia siempre han tenido una relación excelente. Si nos fijamos en la ubicación geográfica de ambos países podemos destacar que Marruecos y Colombia son, dos cabezas de puente de dos continentes que comparten, amistad, cooperación, afinidades lingüísticas y culturales.
Nuestras relaciones bilaterales han ido registrando, desde su establecimiento en 1979, hasta hoy en día, una dinámica positiva.
Tanto la reapertura de la Embajada de la Republica hermana de Colombia en Rabat en el 2013, como las numerosas visitas realizadas por Su Excelencia la Señora Ministra de Relaciones de Exteriores a Marruecos o por Usted misma, Señora Viceministra, han dado, un nuevo impulso a nuestras relaciones políticas.
Nos alegra también, reconocer, el valor añadido de la cooperación fructífera existente entre nuestras dos instancias legislativas. Un valor, que se ve reflejado en los diversos encuentros de trabajo e intercambios realizados, en los últimos años, entre los Congresistas y Diputados de ambos países.
En el marco de esta firme voluntad de cooperación y acercamiento, que se verá sin duda fortalecida en este año legislativo, quisiera aprovechar esta ocasión, para felicitar y saludar, la presencia con nosotros, del Honorable Presidente de la Cámara de Representantes, de la Honorable Señora Vicepresidenta de la Cámara, de los Honorables Presidentes de las dos Comisiones de Relaciones Exteriores de la Cámara y del Senado, y también, de todos los congresistas representantes de la Nación, hoy aquí presentes.
Estamos muy satisfechos del nivel de cooperación, que existe también, entre Marruecos y el Parlamento Andino. De igual manera, me gustaría saludar la presencia, con nosotros, del Señor Secretario General de esta Institución.
Con su apoyo y el de todos, lograremos intercambiar nuevas y valiosas experiencias en temas de interés común y en favor del progreso y desarrollo de nuestras naciones.
Señoras y Señores,
Si nuestras relaciones se mantienen excelentes a nivel político, esto debería incitarnos a reforzar, aun más, los intercambios comerciales entre el Reino de Marruecos y la República de Colombia, que siguen muy por debajo de las potencialidades e expectativas de ambos países.
Para ello, la apertura de la Oficina de la Alianza del Pacifico para África en Casablanca, contribuirá sin duda, al fortalecimiento de las relaciones de cooperación económica y comercial, ya que Marruecos puede constituir una plataforma de la Alianza hacia África y por consiguiente, la puerta de entrada de inversiones, empresas, y productos que aspiren a posicionarse en los mercados africanos.
A su vez, Colombia podría constituir, igualmente, una puerta de entrada de nuestras empresas y productos a los mercados latino-americano.
La lejanía o la distancia geográfica, ya no pueden ser excusa para no desarrollar una agenda bilateral relevante, en el ámbito económico y comercial.
De ahí, el Reino de Marruecos, con su doble dimensión mediterránea y atlántica y siendo el único país hispanohablante del mundo árabe, es el mejor situado para desempeñar, el papel de unión y enlace entre América Latina, África y el Mundo Árabe.
Gracias a sus numerosos acuerdos de libre comercio, tejidos con varios países, a su buena conectividad aérea, y a su compromiso hacia el desarrollo sostenible y duradero de su continente, Marruecos se ha convertido en el segundo inversionista a nivel de toda África.
El retorno del Reino de Marruecos a la Unión Africana, a principios de este año, es también, fruto del liderazgo regional y de la presencia activa del Reino en el continente, como país emergente y de reconocida experiencia.
Siendo un país turístico por excelencia, Marruecos es hoy en día, uno de los destinos más atractivos a nivel mundial. Sus tres componentes mar, montaña y desierto, unidos al encanto de sus ciudades imperiales y sus medinas blancas, hacen de él, la mejor opción para muchos colombianos que han decidido cruzar el atlántico y descubrir un país que fascina, por su cultura milenaria, sus tradiciones, su hospitalidad, su arquitectura, su gastronomía y su estilo de vida.
Señoras y Señores,
Partiendo de los vínculos de amistad y reciproca consideración, que unen a nuestros dos Jefes de Estado, Su Majestad El Rey Mohammed VI y Su Excelencia el Presidente de la República de Colombia, el Doctor Juan Manuel Santos Calderón, quisiera asegurarles, el empeño que me anima como Embajadora de Su Majestad El Rey para seguir obrando, de concierto con mis amigos tanto en el Gobierno y en el Congreso de la República, como en el mundo de los negocios, para consolidar, y enriquecer, las relaciones de cooperación entre nuestros dos países.
Sin olvidar, la firme voluntad de fortalecer las relaciones del Reino de Marruecos, en su calidad de miembro observador, con los países de la Alianza del Pacifico, del modo que responda, a las ambiciones de nuestros dos pueblos amigos, y contribuya al refuerzo de la cooperación Sur-Sur.
En este marco me gustaría hacer un agradecimiento muy especial a la Señora Canciller, a la Señora Viceministra aquí presente, al señor Viceministro de Asuntos multilaterales y a todos los funcionarios de la Cancillería, que siempre nos han brindado su apoyo y su colaboración.
Confío en que el futuro depare para el pueblo hermano de Colombia, mucha paz y mucha prosperidad. Estoy segura de que un País que ha regalado a la humanidad grandes sabios y grandes intelectuales, sin olvidar el Premio Nobel de la Paz, podrá aportar mucho al entendimiento, a la convivencia y a la paz, no solamente en América Latina, sino que en todo el mundo.
Para concluir, permítanme reiterar mi voluntad de esforzarme, con determinación, para que nuestros dos países y nuestros dos pueblos, puedan sacar el máximo provecho del enorme capital de amistad que existe entre Marruecos y Colombia desde hace más de 38 años.
Viva la República de Colombia.
Viva el Reino de Marruecos.
Viva la Amistad Marroquí-colombiana.
