Nos hacen reír. Según un estudio publicado en la revista «Society & Animals», quienes poseen perros se ríen más. Para la investigación se pidió a las personas que tenían perros, gatos, ambos o ninguno que registraran la frecuencia con la que se reían en el transcurso de un día. Aquellos que poseían solo perros y perros y gatos fueron quienes reían más. (Foto: AP)

 

 

 

 

Por miles de años los humanos hemos contado con la compañía de uno de los seres más leales y protectores que existen en el planeta: los perros. Sin duda son grandes mascotas a las que muchas veces adoptamos como parte de nuestra propia familia, atribuyéndose incluso el mismo afecto que a cualquier otra humano.

Pero el cariño por los canes, que en varias ocasiones nos lleva a ponerlos en la cima de las listas de mascotas favoritas, no solo se basa en pareceres subjetivos. Diversos estudios científicos han demostrado que los perros contribuyen a nuestro bienestar físico y emocional, llegando, en algunos casos a ayudar a que sus dueños superen momentos emocionales difíciles, como la pérdida de un ser querido o una ruptura amorosa.

Todo el que tiene un perro sabe lo importante que es sacarlo a pasear. De hecho, es un hábito prácticamente obligatorio que ayuda a mantener al animal saludable. Pero, aunque lo pasemos por alto, existen ciertos riesgos, algunos imperceptibles, cuando llevamos a  nuestras mascotas a dar su caminata diaria, así lo aseguran  los expertos.

Médicos de la clínica veterinaria Pure Paws, ubicada en Manhattan, Estados Unidos, se encargaron de elaborar una lista de advertencias sobre los peligros que solemos ignorar durante el paseo de nuestros caninos. A continuación, te la presentamos:

Pesticidas y tratamientos anti plaga

El césped, o mejor dicho los químicos que suelen usarse en su ciudad, son el primer peligro de la lista que señalan los expertos, pues normalmente nuestras mascotas caminan por estas zonas verdes.

El problema es, destacan desde la clínica, que pueden desarrollar una erupción o alergia por contacto, que puede venir acompañada de erosiones. El consejo que dan los veterinarios es lavar la piel irritada del perro con un poco de jabón, pero si el problema persiste puede administrarle algún antihistamínico o llevarlo con su médico de confianza.

Aunque los insecticidas no son el mayor peligro que tu amigo de cuatro patas puede encontrar en un jardín, debes tener especial cuidado con los venenos para ratones que frecuentemente se colocan en el césped. Si tu perro ingiere algún rodenticida, esos bloques de veneno que se usan para alejar a los roedores, puede experimentar hemorragias internas y otros síntomas que ponen en peligro su vida.

Marihuana

En los últimos años han aumentado los casos de ingestión accidental de marihuana en mascotas y eso se debe, en opinión de la veterinaria Stephanie Liff, a las excesivamente flexibles leyes que existen para la posesión de esta sustancia. Además explica que los canes son mucho más susceptibles y tienen más receptores cannabinoides que los seres humanos. Asimismo contó que la reacción en cada perro es diferente y varía de acuerdo a su tamaño.

Aunque la mayoría no presentan síntomas alarmantes, los más pequeños, dijo la veterinaria, «pueden experimentar presión arterial y frecuencia cardiaca baja».

Generalmente los casos pueden ser observados en casa y esperar a que pase el efecto, pero si el can está somnoliento o aturdido entonces hay que llevarlo a la clínica veterinaria para su observación y un tratamiento de hidratación por vía endovenosa.

Agua

Aunque suene increíble, el agua que toman nuestros perros de fuentes o estanques cuando están paseando puede ser mala para su salud. Estos depósitos de agua pueden contener algas que son altamente toxicas y que, tal y como explica la clínica Pure Paws, pueden ocasionar desde babeo excesivo hasta síntomas neurológicos y problemas gastrointestinales en tu mascota.

ambién hay que estar muy pendiente de nuestros peludos en el agua salada. Una visita a la playa puede convertirse en un mal rato si llegan a ingerirla por accidente, ya que puede causarle deshidratación y diarrea.

Liff destaca que incluso los charcos fangosos en los parques tienen bacterias peligrosas como la leptospirosis, letales para nuestros peludos.

Chicles

En realidad cualquier caramelo o resto de dulce que pueda encontrar por el suelo pude hacerle daño, porque contienen Xilitol, un edulcorante artificial que es altamente toxico en los perros. La clínica veterinaria dice que:

«El efecto inmediato es que engaña al cuerpo haciéndole creer que es azúcar, lo que causa hipoglucemia». Además explica que puede causar mareo y debilidad en nuestros canes, y lo más grave puede ocurrir si desarrollan una insuficiencia hepática (que suele aparecer a las 72 horas).

Si tienes alguna sospecha de que tu perro ha comido algún alimento con Xilitol debes llevarlo al médico veterinario para que le induzcan el vómito.

Pan y similares

Muchas personas y locales arrojan a la basura bocados a medio comer o panes para que sirvan de alimento a las aves.  Tu perro puede creer que es un apetitoso bocadillo pero, en realidad, se expone a un gran peligro. Lo mejor es estar atento de las zonas por las que transita el animal.

Finalmente, y aunque debería ser algo obvio, Pure Paws recomienda que tu perro no se coma las heces de otro animal ni de nadie.

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