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LA INCREÍBLE HISTORIA DE PEGANTINA «LA CRIOLLA»

PEGATINA CRIOLLA 10«No doy mi nombre, me gusta que me conozcan como Pegatina y manejar un bajo perfil». Cuando empecé pensaban que era una niña, a partir de ese pensamiento decidí adoptar un poco de la personalidad femenina, cada vez que me presento o pinto es con vestido, pasamontañas, medias veladas y Vans, es el sello artístico de la puesta en escena», narra el artista.

Juan Camilo Cuadrado C

Especial

Primicia Diario

Bogotano, vive en Zipaquirá desde hace un año y medio, trabaja en Señal Colombia como graficador de un proyecto que se llama Mi Señal que es la franja infantil, labor que realiza desde hace tres meses, y será uno de los exponentes jóvenes presentes en Xpo JovenES 2015, del 24 al 26 de septiembre en Corferias.

Se trata de Pegatina la Criolla, su nombre artístico es el único nombre que develó, y como una especie de alter ego realiza una crónica diaria de su labor, «qué me pasó ayer, qué me va a pasar hoy o qué me va a pasar en dos días, trato de contarle a la gente cosas que a ellos también les pasa, la vida común, tomar el Transmilenio, que la novia lo dejó por feo, son pequeñas dosis, pequeños escritos que yo mismo hago».

Su quehacer diario consiste en realizar contenido digital en redes sociales, principalmente Facebook. Asegura que no estudió nada de literatura, ni gramática, y que los escritos salen como fluyen, los cuales siempre están acompañados por un dibujo, «que muchos dicen que es ilustración, pero a mí todavía me falta mucho pelo para esa moña, para decir que soy ilustrador, para eso se necesita estudio, experiencia, pero creo que lo que hago es como una forma de contar mi propio mundo a través de todo esto: los escritos y dibujos».

Gracias a su trabajo ha tenido la posibilidad de viajar y conocer el mundo por medio de su arte, aunque no se considera un artista, muchas personas si le dicen que lo es, «ha sido mucho esfuerzo, al principio sin internet ni nada, tocar llegar y tocar puertas, conocer gente, he tenido muchos problemas, he perdido muchos amigos, por lo mismo, el círculo es tan cerrado que uno tiene que aislarse y a la vez ser un poco antipático. No debería ser así, es un medio para todos, yo no dibujo para mí, sino para la gente que me ve».

«No doy mi nombre, me gusta que me conozcan como Pegatina y manejar un bajo perfil». Cuando empecé pensaban que era una niña, a partir de ese pensamiento decidí adoptar un poco de la personalidad femenina, cada vez que me presento o pinto es con vestido, pasamontañas, medias veladas y Vans, es el sello artístico de la puesta en escena», narra el artista.

Pero antes de ser Pegatina, esté joven artista estudió un semestre de química, para después pasar a diseño publicitario en la Escuela de Artes y Letras, «el dibujo siempre ha estado en mi mente. No tengo familiares artistas, ha sido un trabajo de disciplina. En vacaciones del colegio no salía, era todo el tiempo dibujando».

Hoy en día, dice que se siente feliz, y estar en un evento como Xpo JovenES es la reivindicación de ese esfuerzo, «uno piensa que el Estado nunca ayuda al arte, pero viendo lo que está haciendo Colombia Joven, le da a uno a entender que sí hay apoyo y es muy chévere poder participar de este evento». 

En la feria, Pegatina «La Criolla»  expondrá  el dibujo con una mirada más crítica, para que la gente vea que dibujar lo puede hacer todo el mundo, y demostrar que a partir del error, de una mancha, o de la nada, se puede generar  un discurso, un mensaje, y sin necesidad de haber estudiado 50 años dibujo, y que el valor de este reside más la experiencia que en la técnica.Para Juan Carlos Reyes, Director de Colombia Joven, «así es como el joven ejerce su ciudadanía y las formas institucionales o tradicionales de la ciudadanía no han podido entender eso, y no leen eso porque están en otra lógica, es otra clave, la clave de la ciudadanía tradicional formal, es racional es retórica es articulada a unas formas políticas, la de los jóvenes es: experiencia, sentido, afectividad, estética y es acción» afirmó.

Pegatina, él o ella, tiene el sueño de algún día radicarse en Nueva York, pero que antes de irse quiere ser profeta en su tierra, decir Pegatina está acá, dejando un legado para todas las generaciones que están empezando, «como yo empecé, que no pierdan el rumbo, así como el objetivo es llegar allá y poder exponerme en los grandes escenarios del mundo, para seguir equivocándome, comer mucha maracuyá y patinar mucho», finalizó.