La riqueza  en fauna y flora a lo largo de un Río Magdalena Fotógrafo: Wilmar Duque

Moisés Chávez R.

Una reflexión acerca del papel que debe desempeñar la psicología como disciplina social  en el contexto del impacto ambiental sobre el hombre y la naturaleza, revisa la interrelación con otras  disciplinas como la educación ambiental, la ecología humana, la biología, etnografía, antropología  en su aproximación al impacto ambiental causado por la conducta humana sobre el proceso de degradación del medio ambiente y las posibilidades de aporte interdisciplinario en la prevención, minimización  y concientización del problema ambiental causado sobre el medio desde una perspectiva del desarrollo sustentable y sostenible.

La propuesta surge de la experiencia investigativa a fin de  explorar alternativas de convivencia en torno a los intereses colectivos sobre el agua y la biodiversidad en las comunidades del área de confluencia del río Magdalena  zona de la Dorada (Caldas) – Puerto Salgar Cundinamarca a partir de la exploración social, cultural y educativa a fin proponer soluciones  con el objetivo primordial de  estructurar como acción inicial programas  de educación ambiental que enmarquen el manejo y uso adecuado de residuos y desechos , utilización  de técnicas adecuadas de explotación pesquera, y estrategias comunitarias  de preservación y desarrollo sustentable del medio ambiente.

RÍO MAGDALENA:

El Magdalena tiene una longitud de 1.500 kilómetros, es el tercero en Colombia después del Caquetá con 2.200 kilómetros y el Putumayo con 1.800-, y en el mundo ocupa el 43. Se le suele dividir en tres grandes trayectos: el Alto Magdalena que va desde su nacimiento en el Páramo de las Papas en Nariño hasta la ciudad colonial de Honda Tolima.

El Magdalena Medio que va desde Honda hasta Santander y el Bajo Magdalena que recorre desde  Santander hasta su desembocadura en al mar Atlántico en un punto conocido como Bocas de Ceniza en Barranquilla Atlántico. Los primeros Europeos que vieron su desembocadura fueron Rodrigo de Bastidas y Juan de la Cosa el 1º de Abril de 1501 fecha en la cual se celebra la conversión de María Magdalena y por tal razón se le puso el nombre de Río Grande de la Magdalena con el que se le conoce desde entonces,él También ha tenido otros nombres como lo han sido:

• Guacahayo que significa “Río de la Tumbas” para los indígenas que habitaban en la cercanía de Neiva.
  •Yuma que significa “País Amigo” para los Chibchas.
  • Arli que significa “Río del Pez o del Bocachico” para los antiguos pobladores de Antioquia y Santander.
  • Caripuña que significa “Río Grande o Agua Grande” para los caribeños en vecindades de su desembocadura.

El  desarrollo industrial en Colombia desde  principios del siglo XX afectó lógicamente el medio ambiente con problemas como la contaminación y la  deforestación, donde el  río grande de La Magdalena es una muestra precisa y sensible de las afecciones ambientales. Las épocas de intensa lluvia en Colombia han traído como consecuencias el desbordamiento  del río, que reclama el espacio perdido y hace pagar los precios de deforestaciones sin medida.

Aun no existen en Colombia proyectos con la  magnitud necesaria, que velen radicalmente por la protección del medio ambiente y la preservación de los recursos naturales. La riqueza  en fauna y flora a lo largo de un Río que recorre regiones tan diversas y equidistantes es amplia e interesante, pero la contaminación y la deforestación han hecho perder muchas especies asociadas al Río y que tenían una gran influencia económica y alimenticia en los habitantes de la región.

En el caso particular de los pescadores ribereños de las ciudades  de La Dorada y Puerto Salgar; en el aspecto económico como sabemos  existen gran número de pescadores artesanales que derivan su sustento de la comercialización no solo en épocas de subienda sino de manera rutinaria pues es su labor diaria de trabajo.

Resaltando en esto la pesca de especies  básicas dentro de las cuales se encuentran entre otros: el  bagre rayado (pseudoplatystoma fasciatum); bocachico (prochilodus reticulatus magdalenae); y el nicuro (nicuro pimelodus clarias), los cuales  son fuente de alimento  de los habitantes de estas regiones y base fundamental del ingreso económico de estas comunidades ribereñas, a propósito de estas fechas de principio del año  la conocida y tradicional  subienda  que ha sufrido últimamente el  conocido  impacto ambiental negativo.

Sobre la pesca que se ha acentuado en la actualidad con el fenómeno del niño, lo cual amerita sin lugar a dudas una atención prioritaria desde los organismos encargados  del aspecto ambiental y económico como podría ser la creación de una organización social que aglutine a quienes derivan su sustento de la pesca, mediante cooperativas de pescadores que se apersonen de estas necesidades conformando  una organización social fuerte para afrontar las dificultades de un momento tan crítico como el actual y asimismo estas organizaciones  facilitarían la implementación de  acciones educativas ambientales a fin de preservar esta importante fuente hídrica y el cuidado debido  y controlado de las especies ictéricas fuente del  desarrollo económico y social  para la región.

Cabe  resaltar la labor de  la CAR en Cundinamarca, el Ministerio de Agricultura, CORMAGDALENA y CORPOCALDAS, que  realizan frecuentemente acciones en Pro del bienestar del río grande de la Magdalena y la biota acuática que habita en el mismo. Sin embargo son tantas y tan necesarias las intervenciones que se requieren que las acciones así sean bien intencionadas se quedan cortas ante las grandes necesidades medioambientales, por ejemplo no se han realizado estudios avanzados sobre el  impacto de la contaminación en las  especies de peces  nombradas anteriormente para que a partir de lo encontrado se implementen campañas educativas dirigidas a las comunidades ribereñas a fin de que  se concienticen sobre el cuidado de las fuentes hídricas.

Qué podemos aportar desde las diversas profesiones y especialidades es el tema que nos convoca a desarrollar en este caso desde perspectivas cuyo objetivo básico son las comunidades y los diferentes contextos sociales, los educadores y los psicólogos, como los sociólogos  y quienes trabajan directa o indirectamente con el bienestar del ser humano tenemos nuestra cuota de responsabilidad si queremos un planeta habitable y sustentable para las próximas generaciones.