Exposición personal Pretexto, del artesano Eduardo Santana Guerrero.
Texto y fotos
Lázaro David Najarro Pujol
Camagüey, Cuba,
La ligereza, elegante factura y excelentes diseños distinguen en la exposición personal de máscaras Pretexto, del artesano Eduardo Santana Guerrero, que se muestra en esta ciudad, cuyo segmento más antiguo es Patrimonio Cultural de la Humanidad.
La colección está integrada por alrededor de una decena de máscaras que también el creador las convierte en verdaderas piezas ornamentales de altos quilates estéticos y de «gran dominio de las técnicas propias de la manifestación artesanal.»
La Galería Midas, de la filial camagüeyana de la Asociación Cubana de Artesanos Artistas (ACAA), una recordación a una pieza utilizada por el ser humano desde la antigüedad con propósitos ceremoniales y prácticos.
El curador de la exposición personal Pretexto, Alberto Jesús Chio Rojas recordó también que las máscaras fueron empleadas en los bailes, eventos populares en la nobleza europea de los siglos XVII y XVIII.
Las primeras se elaboraron de corteza árbol y luego de cuero forrado de tela y por último las hacían de marfil o de madera para que tuvieran más consistencia y texturas más reales, apuntó el investigador.
Chio Rojas calificó de «gran simbolismo la máscara de un rostro fragmentado, que nos recuerda un rompecabezas, alegoría indiscutible a la continua búsqueda de quienes somos, sin dejar de mencionar otras donde lo caricaturesco es más que evidente, donde la intención estética de encontrar lo bello aun en lo más feo está siempre presente».