Jeanine Añez explicó al país mediante un video que dio positivo en una prueba del nuevo coronavirus.
La presidenta interina de Bolivia, Jeanine Añez, comunicó en las últimas horas que padece la covid-19 y guardará cuarentena.
Jeanine Añez explicó en un video difundido en redes sociales que seguirá trabajando, pues se siente bien y con fuerzas pese a dar positivo en una prueba del nuevo coronavirus.
«Junto con todo mi equipo hemos estado trabajando por las familias bolivianas durante todo este tiempo y dado que en la última semana muchos de ellos dieron positivo al coronavirus, me hice la prueba y también he dado positivo», reveló Añez en el video.
La mandataria transitoria añadió que estará en cuarentena durante unos catorce días hasta que se haga una nueva prueba para ver cómo se encuentra entonces.
«Me siento bien, me siento fuerte, voy a seguir trabajando de manera virtual desde mi aislamiento y quiero agradecer a todos los bolivianos y bolivianas que trabajan por ayudar en esta crisis sanitaria que tenemos», aseguró.
La presidenta interina concluyó su mensaje afirmando: «juntos vamos a salir adelante, que Dios los bendiga».
El mensaje llega después que se conociera que Añez trabajaba desde la residencia presidencial en La Paz evitando en lo posible acudir a su oficina en el palacio de Gobierno e incluso el pasado miércoles intervino por videoconferencia en un acto en el que se había anunciado su presencia.
El positivo de Añez se suma a los de al menos tres ministros de su gabinete, mientras que otros anunciaron que cumplirían aislamiento por precaución.
La ministra interina de Salud, Eidy Roca, el de Presidencia, Yerko Núñez, y el de Minería y Metalurgia, Jorge Fernando Oropeza, dieron positivo al nuevo coronavirus.
Bolivia reporta 1.577 fallecidos y 42.984 positivos de covid-19, en un país de unos once millones de habitantes, por lo que, según estudios como los que publica la Universidad Johns Hopkins en Estados Unidos, está entre los países más afectados del mundo por esta pandemia en comparación con su población y en cuanto al porcentaje de fallecidos respecto a los casos confirmados de la enfermedad.
Le deseo que se recupere y que el contagio la haga reflexionar de la necesidad de que el «gobierno» desarrolle acciones para evitar que personas sin recursos mueran en sus casas por falta de atención médica. Los cables de noticias precisan que en Cochabamba, las familias deben mantener en sus casas hasta siete días a sus familiares muertos.
«Vecinos de la ciudad boliviana de Cochabamba protestaron este sábado (04.07.2020) poniendo en medio de una calle una carretilla con un ataúd encima envuelto en bolsas. El objetivo es llamar la atención por el drama que conlleva esperar hasta siete días con un fallecido por COVID-19 sin que la familia pueda enterrarlo o cremarlo».
«Es el caso de Rolando P. Z., quien falleció a los 62 años de edad en su casa. El cadáver del que fuera chofer de autobús permaneció hasta el sábado allí, a unos 30 metros del lugar donde los vecinos protestan, porque está sin sepultar desde el domingo pasado. Su hija mayor, Jenny, de 15 años de edad, explica que pidieron ayuda y las ambulancias nunca llegaron. Sin oxígeno, su padre murió».
«La carretilla con el féretro está cercada con una cinta roja que dice «peligro», para que las personas no se acerquen demasiado, mientras que un grupo de vecinos a su alrededor exige su pronto entierro o cremación. Otra vecina de la ciudad, una de las principales de Bolivia, explicó que en el barrio hay otros cinco fallecidos que están en la misma situación. Escenas parecidas se repiten desde hace días en otras avenidas y en el Cementerio General de Cochabamba».