Monseñor Luis José Rueda Aparicio, Arzobispo de Bogotá.
Rafael Camargo
«Hay un lobo rapaz que está destruyendo al pueblo», afirmó monseñor Luis José Rueda Aparicio, Arzobispo de Bogotá, durante la eucaristía de ayer domingo.
Monseñor Rueda, aseguro que el glifosato no es la solución al problema de la coca. Agregó también que este herbicida ataca la vida de las personas, del medio ambiente y las organizaciones sociales, pues «es necesario escuchar el clamor de todas las regiones de nuestro país, pero además la violencia es un lobo en todas las formas».
«Hay muchas familias en Colombia que sufren hambre y eso es un flagelo y ese es un lobo que trata de destruir nuestras familias,que no tienen empleo y lo han perdido en este tiempo de pandemia, es una situación muy dura»,dijo.
«Es necesario que le devolvamos a los pobres, la dignidad que los tratemos con el cariño de hermanos, porque somos hijos de Dios y al asalariado, no le importan las ovejas», agregó.
El prelado de la iglesia denunció: «hay muchas mamás, cabeza de familia, que lloran viendo que a sus hijos les corresponde pasar un día entero con un plato de arroz y un huevo frito», e hizo un llamado de conciencia para todas las personas que pasan hambre en el país.
Monseñor Rueda condenó el asesinato de la Gobernadora indígena del Cauca y de los líderes sociales. Afirmó que debe haber verdad, perdón, reconciliación y justicia restaurativa en Colombia.
«Te pedimos perdón porque esta semana ha sido asesinada una líder indígena, Sandra Peña, gobernadora indígena del Cauca, pero junto a ella,han muerto muchos líderes sociales y han asesinado en Colombia a muchos niños que los han llevado al conflicto, a la guerra».
Monseñor Luis Ruedo concluyó diciendo que la Covid también es un lobo que ha cobrado la vida de más de 70.000 personas en Colombia.