El Concejal Jorge Durán Silva, es uno de los pocos que cuenta en su equipo de trabajo tanto en el Concejo como en su movimiento politico con la presencia de destacados lideres afrocolombianos.

José Douglas Lasso Duque

Coordinador  La Candelaria

Primicia.

“Seremos antorcha que ilumine y no tea que incendie”

Eduardo Santos.

Quienes endilgan comportamiento racista al concejal Jorge Durán Silva por la expresión “merienda de negros”,  desconocen el contexto en que esta fue pronunciada y la misma trayectoria del edil en defensa de los derechos de la población negra afrobogotana: Votó en favor del Acuerdo 175 de 2005, «por medio del cual se establecen los lineamientos de la Política Pública para la Población Afrodescendiente residente en Bogotá”; apoya el torneo de futbol afrobogotano, es de los pocos concejales que cuenta con afros en su unidad de trabajo, al lado de Carlos Vicente De Roux y otros 6 concejales, designaron asesores para las propuestas étnicas del Plan de Desarrollo Distrital, se convirtió en  interlocutor directo de la Bancada de Ediles Afrobogotanos durante los debates al PDD, donde abrió espacios para la intervención de los líderes afros y exigió al Secretario de Hacienda, asignar más recursos para la implementación del Plan Integral de acciones afirmativas en favor de la población raizal, negra y palenquera que fueron aprobados en cifras comparativamente inferiores a las de otros sectores poblacionales,  lo cual constituyó parte de sus diferencias con la administración que lo llevaron a no votar el PDD 2012.

El Concejal Jorge Durán Silva, ha tenido la solidaridad de varios liberales entre ellos David Luna, actual Viceministro de Trabajo.

Hoy, triste e impotente, JDS, escucha y observa ante los medios, sesgados y sin compasión, cómo a través de un recorte de vídeo de las sesiones del mes de mayo del Concejo de Bogotá, los enemigos políticos, para asegurar privilegios que avergüenzan, logran opacar sus acciones afirmativas en favor de la población negra, sacar de contexto una expresión poco usual entre quienes no conocen de la cultura negra para referirse a desorden pueril (tradicional en las corporaciones públicas)  y  ponerlo en contra de un número importante de organizaciones y personas negras que al desconocer la totalidad del contenido del video, actúan llevados por una imagen que vale más que las mil acciones, amigos y palabras desplegadas por el veterano Concejal en favor del mismo segmento poblacional que lo condena.

Analicemos que en el aparte que muestran del video, él manifestó: «No ingresa nadie si no es funcionario, o asesor, porque esto se nos está volviendo una merienda de negros». Las palabras resaltadas indican que él se incluye, no es excluyente; y en otro sentido, si el concejal Jorge Durán Silva fuera negro, tendrían la misma interpretación? Será que en vez de discriminación se está armando es una persecución? ¿No será que se está utilizando a los negros para zanjar el conflicto en contra del concejal? ¿Por qué deciden publicar el fragmento 4 meses después del evento? En todo caso, 35 años de reelección con tantos amigos afros a su favor, es fácil convertirse en la envidia de tantos oligarcas dueños de la ciudad.

No es justo que se utilice la sensibilidad de nuestros hermanos negros o indígenas para dirimir conflictos que distan mucho de la verdadera realidad social y económica que padece esta población por cuenta de la desidia y el abandono del estado. La verdadera discriminación reside en el trato desigual con privilegio de pocos que históricamente ha patrocinado el estado.  La nación colombiana se ha caracterizado por tener un estado excluyente y distractor, que ampara su realidad violenta, corrupta y discriminadora en escándalos como estos.

Finalmente, si por el refrán, ha de ser víctima el concejal, que sirva de florero de Llorente para revolucionar a nuestros negros, indígenas y pobres de todas las razas contra la asolapada clase política y burgués que nada dice para no ofender pero de todo hace para hacerse dueña de las libertades ajenas. Si no es así, entonces preguntémonos de una vez por todas: Tanta alharaca para qué? Y al final esto no será más que una merienda de concejal y todo seguirá igual. En Colombia todos meremos la PAZ.