Restos de un edificio destruido en un ataque israelí en Gaza (AP)
Javier Sánchez
Israel afirma que hay más de 100 personas secuestradas y 2.200 heridos, de los cuales 343 están en estado grave. Los bombardeos sobre Gaza causan 413 fallecidos y 2.300 heridos. El ejército israelí aún combate con milicianos palestinos armados en varias localidades del sur.
El embajador de Israel ante las Naciones Unidas ha acusado al grupo islamista palestino Hamás de cometer crímenes de guerra y prometió que era hora de «destruir la infraestructura terrorista» de la organización. «Son crímenes de guerra flagrantes y documentados», ha asegurado Gilad Erdan en una reunión a puerta cerrada del Consejo de Seguridad de la ONU.
Fuera de la sala, Erdan ha afirmado a los periodistas que «la era de razonar con estos salvajes [en referencia a Hamás] ha terminado». «Ahora es el momento de destruir la infraestructura terrorista de Hamás, de borrarla por completo, para que tales horrores nunca más se vuelvan a repetir», ha exigido. Erdan ha pedido a la comunidad internacional que apoye plenamente a Israel y condene las acciones de Hamás.
Más de 700 israelíes asesinados, 2.048 heridos y un centenar de secuestrados es el balance aún no definitivo del ataque.