El presidente de Colombia, Gustavo Petro Urrego, atendiendo a la prensa que cubrió la COP28,en Dubái,
El presidente de Colombia Gustavo Petro Urrego en el marco de la COP28,en Dubai, anunció su unión formal al llamado para un Tratado de No Proliferación de Combustibles Fósiles. Con un contundente discurso dejó en claro su compromiso de convertir el país en una «potencia de la vida» y convocó a un verdadero liderazgo mundial, basado en la cooperación internacional para alcanzar la justicia climática y el fin de la era de los combustibles fósiles.
Colombia se ha convertido en el primer país latinoamericano y el mayor productor de carbón y gas en unirse a este bloque de países que buscan frenar la industria hidrocarburífera. El tratado de no proliferación de combustibles fósiles fue una idea que nació en el 2015 de la mano de las pequeñas islas del Pacífico, zonas que podrían desaparecer por la subida del nivel del mar y que han visto con ojos críticos que el Acuerdo de París no mencione explícitamente la palabra «combustibles fósiles» en su texto, esto a pesar de ser los principales causantes del cambio climático a nivel global.
Sobre el Tratado
La Iniciativa del Tratado de No Proliferación de Combustibles Fósiles impulsa la cooperación internacional para poner fin al desarrollo de nuevos combustibles fósiles, la eliminación gradual de la extracción existente dentro del límite climático acordado de 1,5°C y el desarrollo de planes para apoyar a los trabajadores, las comunidades y los países dependientes de los combustibles fósiles para crear medios de vida seguros y saludables.
Petro
«Las emisiones de CO2 también se pueden medir en términos de desigualdad social. Son los ricos los que más emiten y más consumen carbono, son los pobres quienes menos lo hacen. Es esta desigualdad social la causa por la cual han fracasado los objetivos de la COP de París», dijo apenas comenzó su discurso.
Lo hizo en referencia al Acuerdo de París, firmado en 2015, y recordó a todos los países y partes que hay que esforzarse aún más para limitar el aumento de la temperatura de 1,5 °C. También agregó: «El sueño americano, el confort europeo, el síndrome de alcance de China y de India, se basan en el consumo pleno de carbono. Es un consumo basado en la muerte de los demás».
«La sociedad civil en Colombia ha estado presionando por el cambio, y ahora estamos empezando a ver acciones concretas e importantes por parte de Petro y su equipo para acabar con la crisis climática. Brasil, que ostenta la presidencia de la COP30 dentro de dos años y espera hacer de esta reunión un punto de inflexión, podría inspirarse en el compromiso de Colombia para acabar con el petróleo, el gas y el carbón, y comprometerse a eliminar progresivamente los combustibles fósiles».