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Colombia en carne viva: SE QUEMAN NUESTRAS MADRES

Incendio forestal

 

 

 

Hernán Alejandro Olano García

La situación de desastre nacional en Colombia se ha desencadenado como resultado de la intensificación del Fenómeno El Niño, según lo informa la Ley 1523 de 2012. La Constitución Política establece que el Estado colombiano está basado en principios como el respeto a la dignidad humana, el trabajo, la solidaridad y la prevalencia del interés general. Las autoridades tienen la responsabilidad de proteger a los residentes y garantizar sus derechos constitucionales, pero, el decreto 037 de enero 27 de 2024, supedita a que el Consejo Nacional para la Gestión del Riesgo, emita concepto favorable para la declaración de la situación de desastre nacional.

Si el Consejo Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres no aprueba la declaración de la situación de desastre nacional, tendría importantes implicaciones para la capacidad del Gobierno y las autoridades locales para tomar medidas excepcionales y coordinadas en respuesta a la crisis. A continuación, se destacan algunas posibles consecuencias:

Limitaciones en la asignación de recursos: La declaración de situación de desastre nacional habilita la implementación de medidas excepcionales, incluyendo la asignación rápida de recursos financieros y logísticos para hacer frente a la emergencia. Si esta declaración no se aprueba, podría haber demoras en la asignación y movilización de recursos necesarios para combatir los incendios y gestionar otros impactos del Fenómeno El Niño.

Dificultades en la coordinación para frenar el desastre: La situación de desastre nacional facilita la coordinación entre entidades gubernamentales a nivel nacional, regional y local. Sin esta declaración, la coordinación podría volverse más compleja, afectando la capacidad de respuesta conjunta y eficiente frente a la crisis.

Menos flexibilidad en procedimientos administrativos: La declaración de desastre nacional permite la aplicación de un régimen especial que contempla disposiciones excepcionales en materia de contratación del Estado, empréstitos, control fiscal, ocupación de tierras, entre otros. Si esta declaración no se aprueba, las autoridades estarían limitadas por los procedimientos administrativos regulares, lo que podría ralentizar la toma de decisiones y la implementación de medidas urgentes.

Riesgo de intensificación de la crisis: Con focos de incendios en gran parte del país y la persistencia del Fenómeno El Niño, la no aprobación de la situación de desastre nacional podría resultar en una intensificación de la crisis. La falta de recursos y coordinación efectiva podría llevar a un aumento de los daños ambientales, pérdida de vidas, afectación de comunidades vulnerables y dificultades para la recuperación a largo plazo.

En resumen, la aprobación de la situación de desastre nacional es crucial para otorgar a las autoridades las herramientas y la flexibilidad necesarias para abordar de manera efectiva los desafíos planteados por los incendios y otros impactos asociados al Fenómeno El Niño. La no aprobación podría agravar la crisis y dificultar la capacidad del país para responder de manera adecuada y coordinada.