A pesar de presiones, acusaciones y amenazas, la Jueza 44 de Conocimiento de Bogotá, Sandra Heredia, emitirá hoy su fallo sobre el sonado caso del expresidente Álvaro Uribe Vélez.

Rafael Camargo Vásquez

Judicial Primicia Diario

Hoy lunes, 28 de julio de 2025, la Jueza 44 de Conocimiento de Bogotá, Sandra Heredia, se pronunciará sobre la inocencia o culpabilidad del expresidente Álvaro Uribe Vélez en el caso que se le sigue por presunta manipulación de testigos y fraude procesal. La decisión, esperada con gran expectación, se revelará en audiencia pública y se prevé que genere una fuerte repercusión en el ya polarizado panorama político y social de Colombia.

Fallo de Alto Impacto

El caso contra Álvaro Uribe, que ha capturado la atención nacional e internacional durante años, se originó a partir de acusaciones de que el expresidente y su defensa habrían intentado influir en testimonios de exparamilitares para que se retractaran de sus declaraciones que lo vinculaban con grupos armados ilegales. La investigación ha pasado por diversas instancias, incluyendo la Corte Suprema de Justicia y la Fiscalía General de la Nación, antes de llegar a esta fase de juicio.

Dada la profunda división política y social que ha caracterizado a Colombia en los últimos años, y la figura central que representa Álvaro Uribe Vélez en este escenario, es altamente probable que el fallo de la Jueza Sandra Heredia, independientemente de su contenido, exacerbe aún más la polarización en el país.

Si el fallo es absolutorio, los opositores de Uribe lo verán como un acto de impunidad y una confirmación de la debilidad del sistema judicial frente a figuras poderosas, lo que generará indignación y frustración en esos sectores.

Por otro lado, si el fallo es condenatorio, los seguidores de Uribe lo interpretarán como una persecución política y una injusticia, lo que seguramente movilizará a sus bases y profundizará el sentimiento de victimización en la derecha.

En este contexto, es difícil imaginar que la decisión judicial logre un consenso o calme los ánimos. Más bien, se espera que cada lado utilice el veredicto para reforzar sus narrativas preexistentes, haciendo aún más compleja la búsqueda de puntos de encuentro en la sociedad colombiana.

Presiones

Es crucial recordar que, en casos de alto perfil como el del expresidente Álvaro Uribe, el escrutinio mediático es intenso. Los periodistas de grandes medios tienen la responsabilidad de informar sobre el desarrollo del juicio, los argumentos de las partes y las expectativas del fallo.

Sin embargo, el rol de la prensa es informar, no presionar. Cualquier acción que vaya más allá de la cobertura periodística objetiva y se convierta en un intento de influir en una decisión judicial iría en contra de los principios éticos del periodismo y de la independencia judicial. Este caso se ha registrado con las cartas enviadas a la juez, donde revelan su acción como activistas políticos.

La Jueza Sandra Heredia, como cualquier operador de justicia, debe basar su decisión exclusivamente en las pruebas presentadas y en el marco legal, manteniéndose al margen de las presiones mediáticas, políticas o de cualquier otra índole. La transparencia del proceso y el respeto por el debido proceso son fundamentales para la legitimidad del sistema judicial.

El entorno del expresidente Uribe ha orquestado una campaña masiva, usando activistas, que fungen como periodistas, políticos, empresarios, abogados y seguidores, para publicitar su supuesta inocencia.