Sergio Fajardo (Centro) 

Iván Cepeda Castro (Izquierda) 

Germán Vargas Lleras (Derecha) 

Javier Sánchez 

Política

El ajedrez político colombiano se redefine de cara a las próximas elecciones, con alianzas que consolidan bloques de poder y un debate que se centra en el futuro de los partidos y las instituciones. La derecha ha formalizado una alianza que promete ser un contrapeso al gobierno actual, mientras que la izquierda busca consolidar su liderazgo.

El reagrupamiento 

La derecha colombiana ha sellado una alianza estratégica entre el expresidente Álvaro Uribe y el exvicepresidente Germán Vargas Lleras, dejando con premio de consolación a Juan Carlos Pinzón al congreso (Centro Democrático). Esta coalición, que se ha tejido desde el inicio del gobierno de Gustavo Petro, cuenta con el respaldo de los tradicionales partidos Liberal y Conservador, así como de movimientos de cristianos y de Cambio Radical.

En el centro, el panorama parece favorecer a Sergio Fajardo, quien ha logrado una ventaja frente a sus competidores. Por su parte, la exalcaldesa Claudia López experimenta una baja en su popularidad, mientras que el exministro Alejandro Gaviria ha anunciado que no buscará la presidencia, sino que aspirará a un puesto en el Senado.

En la izquierda, la candidatura del senador y defensor de derechos humanos Iván Cepeda se consolida, aunque la contienda también incluye a Daniel Quintero y a la exministra Carolina Corcho. Definitivamente Gustavo Bolívar, quien lideró las encuestas a la presidencia de la República, en las ultimas semanas experimenta abandono de muchos de sus seguidores.  Los analistas políticos pronostican que el centro y la derecha disputarán un lugar en la segunda vuelta, mientras la izquierda buscará mantenerse en la contienda presidencial.

El debate 

El panorama político se enriquece con el debate sobre el estado de los partidos y la crisis del sistema de salud:

Carolina Corcho, exministra de Salud, ha señalado que los partidos se han convertido en «empresas electorales que venden avales». Por el contrario, ha destacado la consulta popular y la paridad de género del Pacto Histórico como un ejemplo para una reforma política que fortalezca a los verdaderos líderes y partidos.

El escritor Fernando Vallejo ha expresado su profunda crítica a la clase política, describiéndola como «vil, rapaz, cínica, miserable y despreciable» por haber «hundido a Colombia en su vileza».

En una línea similar, Roy Barreras, exsenador y exministro, ha señalado a los responsables de la crisis de la salud, cuestionando por qué no se han pagado las deudas a clínicas y hospitales y se ha utilizado el dinero de los ciudadanos para otros fines.

Tato Cepeda, por su parte, ha lamentado que, a pesar de las décadas de deficiencia en el servicio de salud, «la hay gente que sigue defendiendo ese modelo».

El debate político en Colombia se calienta a medida que los actores se posicionan y las alianzas se consolidan. La discusión se centra no solo en las candidaturas, sino en la necesidad de una profunda reforma que solucione los problemas de corrupción y de un sistema de salud que ha colapsado.