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LA PAZ

Por fin se dio el primer paso 

La paz es un derecho para todos los seres humanos. Los colombianos no entendemos cómo algunas personas u organizaciones, de manera abusiva, asumen posiciones que la mayoría de los colombianos no compartimos.

 

La paz es una obligación del Estado para con todos los habitantes del territorio patrio. Cualquier esfuerzo que se haga es poco, cuando se trata de la paz; y por ello, no entendemos algunas posiciones extremistas, especialmente de derecha, cuando quieren obligar al Gobierno a que no busque los mecanismos de la reconciliación.

 

La paz es un anhelo de los colombianos y, seguramente, cada esfuerzo que se realice recibirá el respaldo mayoritario, por cuanto la gente quiere que cese. de una vez por todas, la guerra, durante la que la peor parte siempre la lleva la población civil.

 

Llegó la hora de tomar decisiones radicales que permitan buscar la forma de evitar que siga el baño de sangre. No comprende nadie por qué nos estarnos matando entre colombianos; y, lo más grave, que estén combatiendo pobres contra pobres.

 

Los «guerristas» tienen que calmar sus ansias de sangre en otros escenarios, donde se excluya a los colombianos que buscan y anhelan, de una vez por todas, tener un país libre de violencia y concentrado en buscar el progreso y el desarrollo.

 

La paz debe ser un esfuerzo de todos. Necesitamos que las próximas generaciones queden libres del odio que se registra desde hace más de sesenta años, tiempo de duración del conflicto interno, sin vencedores y sin vencidos; pero con la pérdida de vidas y de la tranquilidad de los colombianos más vulnerables, especialmente en las zonas apartadas, donde ellos son las víctimas de la absurda guerra.

 

Colombia es un país rico en todos los aspectos: su gente y sus recursos naturales; pero, desafortunadamente, la guerra ha convertido al país en un territorio donde la equidad no existe; donde cada día se avanza en pasos agigantados hacia la miseria total, todo como consecuencia de una guerra sin sentido.

 

Es hora de tomar decisiones definitivas, a pesar de la oposición de las fuerzas «guerreristas», que no permiten la paz de los colombianos, porque esas fuerzas son las que se han beneficiado política y económicamente.

 

¡Colombia reclama y exige la paz! Cualquier esfuerzo que se haga es poco para lograr la paz.