La mirada inocente de Angélica Yulieth Murcia
La niña Angélica Yulieth Murcia tiene cinco años, acaba de ser operada exitosamente de anaplastia en el Hospital Simón Bolívar de Bogotá por un cirujano Pediatra y va a seguir con su vida normal
Lilia Plazas Moreno
Especial para Primicia
Ya pasó un año. Tiempo en el que no importaba las largas esperas en filas interminables para que se autorizaran los exámenes, citas y ordenes del tratamiento de una Niña de tan solo cinco años.
Esta niña había nacido con atresia anal o ano Imperforado, que es una enfermedad congénita que se caracteriza porque el recto no está conectado a la salida normal y por esto hay que efectuar varias cirugías.
María Margarita Barona Mendez Fisioterapeuta que trabaja con las Unidades Móviles del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar Regional Cundinamarca, desde hace casi de tres años, encontró a la niña Angélica Yulieth Murcia en una tarde del 2012 en Soacha en la UARIV (UAO), cuando atendía junto con el equipo Interdisciplinario de la Unidad Móvil a varias Familias Víctimas del desplazamiento.
La niña presentaba una infección preocupante como consecuencia de una colostomía expuesta que le estaba causando fiebres que le ponía en riesgo su vida.
Desde ese momento, María Margarita Barona Méndez comienza a hacer el acompañamiento vital a la mamá que es una completa garante de los derechos y que por su hija ha hecho hasta lo imposible, a tal punto, que los médicos le enseñaron a realizarle los procedimientos terapéuticos para que su hija se mejorara. Angélica Yulieth Murcia, además padecía de una cardiopatía y de síndrome de Down.
Se propuso como meta que Angélica Yulieth fuera atendida de Forma Integral en Salud (Cirugías requeridas según su Patología de Base, entrega de Medicamentos e insumos para su Tratamiento), y realizar un acompañamiento a los Hospitales. Gestionó citas con especialistas y logró que se le realizara la tan anhelada cirugía (Anoplastica). Orientó y acompañó a la mamá en el proceso de preparación de Angélica Yulirth para la cirugía final (Cierre de Colostomía), que le uniría el colón con el recto.
María Margarita cuenta que pertenecer al ICBF le abrió puertas para que la atención de la niña fuera rápida y cumplida. Su labor la ve como el compromiso adquirido al trabajar por que se cumplan los derechos de los niños en salud, calidad de vida y a la vida misma.
La niña que ya tiene cinco años, acaba de ser operada exitosamente de anaplastia en el Hospital Simón Bolívar de Bogotá por un cirujano Pediatra y va a seguir con su vida normal. Ya el hecho de no tener pañales y de no padecer de los cuidados extremos para evitar infecciones, la hará ser una niña que disfrute de los juegos de su edad. Hoy cuenta con hogar gestor y una articulación directa con el centro zonal de Soacha
Las unidades móviles hacen el acompañamiento en medio familiar donde sea, con lluvia, con frio, realizando caminatas largas y extenuantes, con botas o sin ellas. Pero siempre cumplen con la tarea social de ayudar a las familias que las necesitan para acompañarlas en sus angustias y realizan la atención, sin importar por lo que se sufra.
En Cundinamarca, las cuatro Unidades Móviles están compuestas por un Sociólogo, Fisioterapeuta, Trabajadores Social, Psicólogas y Nutricionistas, quienes atienden a 45 familias victimas del desplazamiento que llegan a Soacha mensualmente.
Largas esperas en filas interminables para que se autorizaran los exámenes, citas y ordenes del tratamiento, soportaron Angélica y su madre.
María Margarita Barona Méndez Fisioterapeuta que trabaja con las Unidades Móviles del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar Regional Cundinamarca, fue el ángel que se la apareció a la niña Angélica Yulieth Murcia en una tarde del 2012 en Soacha.
La niña que ya tiene cinco años, acaba de ser operada exitosamente de anaplastia en el Hospital Simón Bolívar de Bogotá por un cirujano Pediatra y va a seguir con su vida normal. Ahora siempre estará acompañada de su madre y su ángel María Margarita Barona Méndez.