La organización  contactaba  al correo humano, alistar las maletas de doble fondo donde escondían el alcaloide, comprar los tiquetes aéreos y conseguir las sustancias estupefacientes.

Condenan a exfuncionario de la Aerocivil y otras dos personas por tráfico de estupefacientes

Como coautor del delito de fabricación, tráfico o porte de estupefacientes, Neftalí Garzón, exfuncionario de la Aeronáutica Civil fue condenado a 21 años de cárcel por el  Juzgado Octavo Especializado de Bogotá.

La decisión también afecta a Óscar Bordillo y José Cantillo, también en calidad de coautores, quienes deberán purgar 22 años de prisión por la conducta antes citada y por concierto para delinquir agravado.

El fallo se conoció luego de concluido el juicio oral que se le seguía a los hoy condenados por su participación en una red internacional de tráfico de estupefacientes que se especializaba en el envío de este tipo de sustancia mediante la modalidad de correos humanos hacia Estados Unidos y España.

Desde su captura en 2010, un fiscal de la Unidad Nacional Antinarcóticos e Interdicción Marítima (Unaim) demostró más allá de toda duda que el entonces funcionario de la Aerocivil Colombiana facilitó el envío de cocaína y heroína fuera del país, al menos en una ocasión.

Asimismo, comprobó que el rol dentro de la organización de los otros dos individuos era la de contactar al correo humano, alistar las maletas de doble fondo donde escondían el alcaloide, comprar los tiquetes aéreos y conseguir las sustancias estupefacientes.

Durante el juicio el fiscal del caso dio a conocer varias interceptaciones en donde se ordenaba que cada vez que las autoridades detectaran un envío, debían proporcionar al correo humano un abogado con el fin que éste no los delatara.

En otros audios el representante del ente investigador dio a conocer la violencia que la organización ejercía mediante amenazas a los correos humanos y la presión a sus familias,  que estos no colaboraran con las autoridades.

La investigación que dio lugar a la condena Óscar Bordillo, José Cantillo y Neftalí Garzón parte de una solicitud de cooperación internacional que en 2010 hiciera la DEA, y que tenía como fin determinar la participación de un grupo de colombianos en una red internacional dedicada al narcotráfico.

Durante las investigaciones se logró la individualización y captura de 13 miembros de la organización los cuales ya se encuentran condenados por estos mismos hechos.