Destacadas, Editorial

NOTA EDITORIAL: DECLARACIÓN DE CHAPULTEPEC

editorial

 

Declaración de Chapultepec

La prensa, los gobernadores y alcaldes de Colombia compartirán los principios de laDeclaración de Chapultepec, documento que promueve la vigencia de los valores periodísticos en el hemisferio occidental.

La firma de la declaración por parte de los funcionarios colombianos se realizará en la sede principal del diario El Tiempo, de Bogotá, donde estará el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos Calderón. También asistirán al acto otros directivos y ejecutivos de la Sociedad Interamericana de Prensa ─SIP─ y de la Asociación Nacional de Diarios de Colombia ─Andiarios─, entre otros.

Con laDeclaración de Chapultepec es tarea del periodismo buscar y difundir informaciones, ideas y opiniones en uso de la libertad de expresión, para contribuir  a que cada ciudadano ejerza en plenitud esa libertad y su derecho a la información, imprescindible para la toma de decisiones: desde las que atañen al ejercicio de su soberanía ciudadana hasta las que le permitan alcanzar una vida plena acorde con sus deseos y legítimas ambiciones.

Para cumplir con su objetivo a plenitud, la prensa debe contar con todas las garantías para recoger y divulgar las noticias libremente. Un poder judicial independiente que asegure el respeto a los derechos inherentes a la persona humana y garantice la vigencia de las instituciones democráticas, es esencial a esos efectos. En consecuencia, es propio de la prensa promover los valores de la democracia y defender la libertad de expresión, y afirmar el derecho de cada uno a expresarse en libertad sin temor a represalias de ningún tipo, cualquiera que sea su origen.

La efectividad de la tarea periodística estará determinada por el nivel de confianza y respaldo de los lectores, que constituyen el máximo tribunal. Ganar esa credibilidad es un compromiso para la prensa y la obliga al mayor nivel de transparencia, independencia y honestidad. Todo ello debe primar al momento de decidir qué informar y la prensa debe ser rigurosa en los estándares de verificación a utilizar. Nunca debe publicar algo que sabe que es inexacto, de la misma manera que no puede caer en la deshonestidad de difundir una información como propia y original, cuando se trata del trabajo ajeno.

La prensa debe reconocer en tiempo y forma sus errores en la descripción de hechos y debe estar dispuesta a publicar información y análisis críticos acerca del periodismo. Las opiniones que expresen discrepancias con los puntos de vista de un periodista o de una empresa editorial, y también los hechos que pueden dañar sus propios intereses, deben difundirse siempre que se ajusten a los mismos criterios aplicados a otras noticias: interés público y exactitud.