Paloma Valencia será sin duda la nueva senadora del departamento del Cauca, que representa no sólo a la mujer, sino a las nuevas generaciones que impulsan el relevo generacional de aquellos dirigentes que se apropiaron e hicieron suyas las curules en senado y cámara.
Álvaro Jesús Urbano Rojas
Especial para Primicia
Popayán
Por nuestro arraigado machismo Colombia fue de los últimos países de América en concederle derechos políticos a las mujeres, anhelo alcanzado por la vehemencia en la lucha de dirigentes como Josefina Valencia de Hubach, quienes lograron el 27 de agosto de 1954 que el dictador general: Gustavo Rojas Pinilla, impusiera a través de una reforma constitucional el derecho a las mujeres colombianas de elegir y ser elegidas. En agosto del 2014, se cumplen 60 años de la reforma, derecho del que las mujeres hicieron uso por primera vez el 1 de diciembre de 1957 durante el llamado plebiscito Nacional.
El plebiscito fue convocado para el primero de diciembre de 1957 y se constituyó en el primer acto político de la mujer en Colombia, en el pleno ejercicio de sus derechos. Un hecho trascendental para la vida nacional. En aquel certamen electoral sufragaron 1.835.255 mujeres, siendo una jornada exitosa para esa fecha y como reconocimiento a las mujeres que lucharon por ganar aquel derecho democrático, Rojas Pinilla designó a la primera mujer en ocupar un ministerio: Josefina Valencia de Hubach, quien ocupó el Ministerio de Educación y luego fue gobernadora del Cauca.
Hoy no se discute la fuerza electoral de la mujer en los procesos electorales; el Censo electoral del país es de 31.736.039, de los cuales 16.489.846 son mujeres. En el Cauca el censo electoral es de 819.000 electores de los cuales 412.000 son mujeres. Pese a ese gran caudal y potencial electoral de la mujer en el Cauca, la participación de la mujer en los cargos de elección es mínima y hasta decepcionante el Cauca no ha podido elegir a la gobernación y a la alcaldía a una mujer, siendo que su participación es muy activa en la logística y las organizaciones estructurales de los partidos y movimientos, en la agitación, organización de las campañas. Pero a la hora de elegirlas, muy pocas lo logran porque todavía en el cauca hay una concepción machista de la política.
No por circunstancias de coincidencias histórica el Cauca vuelve a ofrecer al panorama nacional, una mujer nacida de las mismas entrañas de la familia Valencia, con vocación presidencial, filosofa y abogada; sin duda, una de las jóvenes más influyentes en la política nacional, de talante y frentera, con calidades excepcionales para la confrontación ideológica, apasionada de la escritura, la política y el medio ambiente, periodista de opinión, invitada a muchos foros y mesas periodísticas sobre temas delicados por el riesgo que implica debatirlos con la entereza y coraje con que los asume, Paloma Valencia Laserna.
Según la joven líder, Colombia se encuentra en un punto muy importante para la transformación política que necesita dada la coyuntura que en este momento atraviesa. Ha denunciado que en estas elecciones el gobierno nacional y los políticos tradicionales pretenderán comprar conciencias al referirse como se viene dando el tránsito de dinero para comprar la conciencia de los colombianos que ejercerán su voto en las próximas elecciones al congreso. Es una mujer valiente, sus críticas frente al proceso de paz, es contundente, según ella, no se puede premiar a una organización terrorista que ha violado los derechos humanos.
Paloma Valencia será sin duda la nueva senadora del departamento del Cauca, que representa no sólo a la mujer, sino a las nuevas generaciones que impulsan el relevo generacional de aquellos dirigentes que se apropiaron e hicieron suyas las curules en senado y cámara. No es posible que permanezcan por más de veinte años ocupando escaños sin permitir el relevo generacional, muchos de ellos ausentes ante las cruentas realidades sociales. Un departamento sumido en la desesperanza y con la angustiante necesidad de superar el estado postrero en que su dirigencia y los propios electores lo han postrado. Mujeres caucanas ustedes tienen la palabra.Paloma Valencia será sin duda la nueva senadora del departamento del Cauca, que representa no sólo a la mujer, sino a las nuevas generaciones que impulsan el relevo generacional de aquellos dirigentes que se apropiaron e hicieron suyas las curules en senado y cámara
Lastima por esta muchacha que se ve buena persona para meterse con la delincuencia del paramilitarismo y narcotrafico del país. Cada quien escoge sus amigos o complices
Mujeres como Palomo deben llegar al Congreso, para acabar con los corruptos
Palomita que triste es escuchar una joven sin nada por dentro del cerebro , programada para defender a toda costa y sin razón al gran capo que quiere que la guerra siga en Colombia
Paloma : no te conozco pero no necesito hacerlo para percibir que «tienes madera». No tienes mi voto , Una buena sombra te cobija ( que no necesariamente es «buena») pero creo que tienes que brillar con «luz propia» .