Reconocidos periodistas del país, a partir de fragmentados elementos de pruebas y comunicados de prensa, han concluido la culpabilidad de Silvia Gette en el homicidio de Fernando Cepeda.

 

Alejandro Arias

Santa Marta

 

Este caso de Silvia Gette me llamó la atención particularmente porque reconocidos periodistas del país, a partir de fragmentados elementos de pruebas y comunicados de prensa, han concluido la culpabilidad de esta señora en el homicidio de Fernando Cepeda. Vulnerando de esa forma el derecho fundamental de los televidentes, radioescuchas y lectores a ser informados verazmente.

 

Se dieron dos de esos ejemplos. El primero las expresiones del admirado periodista Pirry en el Canal RCN y el otro el de la destacada periodista Salud Hernández, columnista de opinión de El Tiempo, en su columna editorial

A propósito, el manual de redacción de El Tiempo enseña que la confrontación o cruzamiento de fuentes es una obligación del periodista. Precisa esta guía que en el manejo de la información que se obtenga, el periodista debe tomar las siguientes precauciones: a) establecer la idoneidad de la fuente sobre el tema de la información, b) preguntarse si puede haber una razón oculta para que la fuente exprese las opiniones que está emitiendo y c) que en el caso de que pida no ser mencionado, preguntarse cuál es la razón de dicha solicitud.

Y en todo caso, agrega el manual, que la atribución de una noticia a determinada fuente no exime al periodista de la responsabilidad que resulte por haberla publicado.

Resultaron especialmente llamativos estos ejemplos porque en ambos casos los periodistas evidenciaron desconocer la decisión judicial fechada 14 de enero de 2014 proferida por la Fiscal 10 de DDHH con la que concluyó no había méritos para librar orden de captura en contra de Gette Ponce por no encontrarse, en el expediente, pruebas que condujeran a establecer responsabilidad alguna de ésta en el homicidio de Cepeda

Razón por la cual Gette Ponce no está detenida por la investigación del homicidio sino por la del presunto soborno.

Razones como las de estos ejemplos motivaron mi interés por este caso.

Mi primer hallazgo en relación a este asunto judicial fue en septiembre de 2012 en una entrevista que me concediera José Gelvez Albarracín, alias Canoso; entrevista con la que quería ampliar las informaciones de la relación del actual alcalde de Santa Marta, Carlos Eduardo Caicedo Omar, con los jefes paramilitares y la negociación de la Universidad del Magdalena con alias Jorge 40 en sus épocas de rector; y de sorpresa en medio de la misma Canoso alertó sobre lo que estaba sucediendo con Silvia Gette

En esa misma entrevista Gelvez Albarracín denunció el intento de homicidio de que fue objeto según él por parte de alias Don Antonio.

Después de un año de entrevistas a postulados y no postulados a Justicia Paz relacionados con este caso, oír más de 70 horas de audios entre audiencias y declaraciones y haber leído poco más de cuatrocientos folios encontré a un protagonista que hasta esa fecha no había sido escuchado dentro del proceso, Juan Francisco Segura Gómez, alias Alacrán.

A quien pude entrevistar el 2 de septiembre y quien contó nuevos detalles sobre el homicidio de Fernando Cepeda que coincidían con otros testimonios que ya estaban en el expediente y apuntaban a señalar la responsabilidad de María Paulina Ceballos y la inocencia de Gette Ponce.

Publicadas la entrevista de alias Alacrán empecé a recibir llamadas de celulares desconocidos en los que aparentemente se escuchaban disparos. Luego se dieron a conocer, en algunos medios locales de comunicación, que alias Canoso se había retractado de algunas de las declaraciones a mi entregadas en 2012.

Recibí entonces la llamada de Gelvez Albarracín en la que me prevenía por mi seguridad y aclaraba las razones por las que se había retractado y en las que señalaba amenazas de alias Don Antonio contra él y su familia, pidiéndome a su vez pusiera en conocimiento a las autoridades y dejara un registro por si le pasaba algo. Documento que entregué a la Unidad Nacional de Protección, al Defensor de DDHH José Humberto Torres. Audio que luego fue incorporado en el expediente de dicho asunto ante la Fiscalía correspondiente.

A lo anterior se suma que los abogados de la defensa de Arcadio Martínez Pumarejo y Silvia Gette descubrieron un rosario de pruebas y declaraciones que permitían prever la posible existencia de un complot para inculparlos.

De todos estos elementos resultaron ser los más relevantes, a mi juicio, las consideraciones que el abogado Cesar Londoño -apoderado de Martínez Pumarejo- hizo sobre la famosa prueba reina del soborno. Al denunciar la existencia de varios cd´s en la Fiscalía 214 de DDHH que no correspondían ni en duración ni en contenido al ser comparados con el cd hallado en la Fiscalía 10 de DDHH y que según sus criterios éste último revelaría el verdadero motivo del dinero que se entregaría siendo el móvil uno diferente al de un soborno, consideraciones sustentadas en audiencia preparatoria para juicio celebrada el pasado 20 de agosto

También llamaron mi atención las precisiones que el abogado Luis Jiménez -apoderado de Silvia Gette-  hizo sobre las declaraciones que varios «ex paras» rindieron ante la Fiscalía en relación a lo que sabían del homicidio de Fernando Cepeda y la presunta relación de María Paulina Ceballos con el homicidio de su esposo. Pruebas que solicitó y sustentó en la misma audiencia preparatoria

Aun así, faltaba escuchar a quien se constituía en el eslabón, hasta ahora desconocido para el público, que une la planeación, ejecución y la verdad del asesinato de Fernando Cepeda y el caso que por el mismo se le sigue a Gette Ponce. Ese es Rafael Antonio Velilla Delgado, alias Costeño.

Alias Costeño fue la persona que junto con alias Aguas, Comandante en Sabanalarga de las Autodefensas, alias Felipe y otros planearon y ejecutaron ese asesinato. Paradójicamente, alias Costeño es el único que sobrevive del grupo que lo planeó y lo ejecutó y que hoy igualmente denuncia estar amenazado junto con su familia por revelar la verdad de estos hechos.

El pasado 10 de octubre, luego de dos meses de trabajo y trámites ante el Inpec, logramos entrevistar a Velilla Delgado. Quien además confesó haber mentido en sus declaraciones contra Silvia Gette a solicitud de alias Don Antonio y 28, que a su parecer la única responsable del homicidio fue María Paulina Ceballos y que de todo ello aportó pruebas en cd a la Fiscalía; que nunca le dio ni quiso darle declaraciones en entrevista al periodista Pirry, solicitud para la que Pirry insistió a través del abogado de Velilla Delgado y cuatro mediadores más recibiendo la misma respuesta: no; y que jamás le dijo a la periodista Salud Hernández, en la entrevista que le concedió, que Silvia Gette hubiera sido la responsable de ese homicidio.

Más allá de sus declaraciones, insistió en que todo lo que se ha dicho contra Silvia Gette en relación al homicidio de Fernando Cepeda son «mentiras, mentiras y mentiras» y que si no le creen que la Fiscalía investigue lo que él dice y prueba en con las declaraciones y cd´s entregados recientemente.

 Testimonios que ya estaban en el expediente y apuntan a señalar la responsabilidad de María Paulina Ceballos, en el homicidio de Fernando Cepeda

Con el primer testimonio de alias Don Antonio se acusó a Silvia Gette del homicidio de Fernando Cepeda.

José Gelvez Albarracín, alias Canoso , acusó a  María Paulina Ceballos del homicidio de Fernando Cepeda