Destacadas, Noticias, TOP

DIEGO LONDOÑO: «MEDELLÍN ES UN PENTAGRAMA»

 

Panoramica-Nocturna-Medellin-9

 Medellín cultural, de las calles y avenidas, de su gente, de su imparable actividad comercial

Si uno camina la ciudad puede ver ese abanico tan grande de música

 

Jorge Consuegra

Bogotá D.C.

Él mismo lo dice: «La música es mi vida». Y así es. Uno trata de llevarlo por otros temas y él siempre regresa a la música. Tratamos, por simple ejercicio, de llevarlo por el mundo del fútbol ya que en Medellín respira las 24 horas el oxígeno del balompié, pero nada, Diego Londoño volvía una y otra vez a su mundo de la música, siempre la música. Tratamos, al mismo tiempo, de que nos hablara de la nostalgia de la Medellín cultural, de las calles y avenidas, de su gente, de su imparable actividad comercial y nada, él volvía con sus canciones y de ese apego, de esa fiebre fue que nació Medellín en canciones que acaba de publicar Ediciones B.

No había nada que hacer sino hablar de su pasión, de su libro, de sus bandas, de sus preferencias.

– ¿Su mundo desde siempre ha sido el de la música?

– Si, desde pequeño empecé a interpretar instrumentos y también puedo decir que gracias a mi abuela canto y conozco mucho de música de todo el mundo. Desde los tangos pasando por el bolero, rancheras, canción protesta, hasta el rock y el más extremo metal. La música me ha dado todo, la música es mi vida.

– ¿Desde cuándo empezó a ser un «tan fatal»?

– Empecé a ser un «fan fatal» desde el momento en que me apasioné por la música de Medellín y quise a través de mi trabajo y mi cariño, aportar a las bandas y a la historia de la música y el rock de Medellín y Colombia. Desde el día en que decidí vivir por, para y con la música.

– ¿Cuáles fueron las primeras bandas con las usted empezó a construir su mundo musical?

– Si hablamos del mundo: Hay dos bandas muy importantes en mi historia musical: The Clash y Nirvana. Colombia: Aterciopelados y La Derecha. Medellín: IRA, GP y Bajo Tierra.

– ¿A qué edad inició los primeros apuntes para crear su propia «enciclopedia» de datos?

-Inconscientemente escribía cosas, grababa notas de pensamiento sobre música, pero nunca con alguna pretensión. Más o menos desde el 2006, vengo haciéndolo conscientemente, yendo a conciertos, observando, escribiendo apreciaciones y narrando lo que pasa con el día a día de los músicos de Colombia. Esto lo he hecho en diversos medios locales y nacionales.

– ¿Qué es lo que siempre le ha encantado del rock?

– Del rock me gusta que me pone a vibrar la vida, me saca de la tranquilidad de los días, le da más revoluciones a mi corazón. Además que es un género comprometido con las personas, con la vida, con los días que van pasando, con la historia y con la memoria. Que es un género cronista, que en vez de basarse en ficciones, cuenta la realidad.

– ¿Ha sido Medellín el mejor pentagrama para conocer todo tipo expresiones musicales?

– Medellín ha sido el pentagrama y ha sido la ruta para conocer todo tipo de expresiones musicales. Creo que si uno camina la ciudad puede ver ese abanico tan grande de músicas. Gracias a la ciudad y a su gente, he podido acercarme a otras realidades que me ha mostrado la música.

– ¿Cómo empezó a construir el libro sobre el rock?

– Yo tengo dos libros sobre rock. Uno se llama: Los Tetis: Una bomba atómica a go go la historia de los abuelos de nuestro rock. El otro se llama: Medellín en canciones. El rock como cronista de la ciudad. Estos libros se empezaron a investigar y a escribir, precisamente pensando en un aporte que necesita la ciudad de ser documentada, es un ejercicio de memoria histórica y musical. Pues a través de rock es posible contar momentos claves en la historia de la ciudad. Entonces es algo así como el desahogo que tienen los músicos al componer canciones, eso mismo me pasa a mí con la escritura y con la necesidad de documentar realidades para que no desaparezcan con el tiempo.

– ¿Cuánto duró el proceso de recopilación de datos de su libro?

– El proceso de recopilación de datos de Medellín en canciones duró, 2 años, más otro año de escritura, edición y corroboración de datos.

– ¿Qué fue lo más complicado en la «construcción» del libro?

– Lo más complicado en la construcción del libro fue la selección acertada de las canciones y obvio también, el filtro de otras canciones que salieron de la compilación. También contactarme con personajes del rock paisa que estaban desaparecidos y que sus historias tenían que estar ahí.

– ¿Este es un libro dedicado exclusivamente a especialistas o para todo tipo de lectores?

Medellín en canciones es un libro que cuenta la historia de Medellín a través de canciones, en ese orden de ideas, es un libro para rockeros, pero también para personas que gusten de la historia de la ciudad. Profesores y estudiantes, urbanistas, historiadores, sociólogos, antropólogos, periodistas y en realidad, cualquier persona puede leer este libro y sacar provecho de él.

– ¿Cree que le quedaron algunos datos por fuera de su investigación?

– Creo que me quedaron todos los datos por fuera, ya que la historia de Medellín se escribe día a día con las canciones que se componen a diario, es una investigación y documentación de nunca acabar, así que es solo una parte de la historia que con los días va pasando. Hay una buena selección, una buena forma de presentar la ciudad de Medellín desde el rock, pero la tarea es no dejar morir las historias recientes que van naciendo.

– ¿Tiene en sus proyectos inmediatos, hacer otro libro similar o parecido?

– Sí, estoy en este momento iniciando otro producto literario, la biografía autorizada de uno de los músicos más importantes en Colombia. Aún no puedo dar muchos detalles sobre este proyecto, pero ya está en marcha y en un tiempo sabrán más de él.

musica11

 «Medellín a través de canciones, en ese orden de ideas, es un libro para rockeros, pero también para personas que gusten de la historia de la ciudad».