«Bogotá Humana» de Petro es un chiste propio del mundo «macondiano», al observar la miseria, la inseguridad, el desempleo y tantos problemas que no tuvo capacidad el alcalde Petro de atenderlos. Foto exclusiva de Primicia . Junior
Jorge Giraldo Acevedo
Bogotá
primiciadiario.com
Primero que todo debemos afirmar que desafortunadamente esta no es una «Bogotá Humana», como la califica el alcalde Petro. Si no «Bogotá Inhumana» como la califican buena parte de los habitantes de la capital.
Por doquier hay huecos e inseguridad, indigentes, desarraigados y orates. Además es delicada la situación por el desempleo y el consecuente aumento del rebusque por parte de vendedores ambulantes.
Como si lo anterior fuera poco, las personas que tenemos que utilizar el Transmilenio viajamos en medio de muchas dificultades y la movilidad ciudadana, en términos generales, es cada día peor.
Entonces eso de la «Bogotá Humana» de Petro es un chiste propio del mundo «macondiano» debido a que, por ejemplo, la población flotante de Bogotá, estimada en más de 2 millones de personas, los turistas y los habitantes del centro bogotano, somos los que tenemos que soportar la pésima situación e imagen que se presenta por un antihigiénico baño público; personas inescrupulosas y sin cultura y más aún carentes de consideración con los demás, a la altura de la carrera 7a. y 8a., entre la calle 18 y 19, han convertido toda esta manzana en un baño público donde realizan sus necesidades fisiológicas.
En este mismo sector funcionó hace muchos años un parqueadero público y el lote perteneció a la Beneficencia de Cundinamarca; uno de los grupos inversionistas en finca raíz proyectó un atractivo plan urbanístico de viviendas y locales comerciales, pero en la actualidad allí lo que se observa es un completo abandono.
Con este lamentable hecho, que lo vemos y padecemos continuamente los obligados transeúntes de esta zona en pleno centro bogotano, ahora se completaron 4 sectores en los que la suciedad, los olores nauseabundos y la pésima imagen son la característica especial; situaciones similares existen en la Parque Santander, en la Plazoleta de la Mariposa, en San Victorino, y en la llamada calle del Bronx.
Para solucionar estos problemas, en las vías públicas de Bogotá, hacen falta concretas medidas de la administración por parte de la alcaldía y la presencia permanente de las autoridades policiales.
Eso es lo que deben ver los candidatos a la alcaldía de la principal ciudad colombiana, que ya están en campaña.
Sí se requiere humanidad en esta ciudad llena de problemas, pues la gente vive angustiada y sufre a diario.
Lo primero, la seguridad y la movilidad; estos dos problemas son un clamor y necesitamos planteamientos de solución.