La Secretaría de Educación de Bogotá, a través de su alianza con Colombia Compra Eficiente, adjudicó dos licitaciones para garantizar los más de 690.000 refrigerios escolares en los colegios de la ciudad.
Después de la crisis que se registró por el manejo de la corrupción en la alimentación de los escolares, durante los últimos tres gobiernos distriales, la Secretaría de Educación de Bogotá, a través de su alianza con Colombia Compra Eficiente, adjudicó dos licitaciones para garantizar los más de 690.000 refrigerios escolares en los colegios de la ciudad.
Estas licitaciones incluyen por un lado la compra de los alimentos, y por el otro el almacenamiento, ensamble y distribución de los refrigerios escolares.
El proceso contó con el acompañamiento de Colombia Compra Eficiente, para garantizar la calidad y la transparencia.
«El alcalde Enrique Peñalosa confió en que los proceso plurales son los mejores para asignar los recursos públicos. En Bogotá son casi 400.000 millones en temas de alimentación escolar y por primera vez en el país se hizo un proceso de licitación con bandas de precios, como lo contempla Colombia Compra Eficiente», sostuvo la secretaria de Educación, María Victoria Ángulo.
Se trata de dos contratos que permitirán que los niños y jóvenes de los colegios continúen recibiendo la alimentación de calidad que ha caracterizado el programa en Bogotá.
Una de las licitaciones incluye la compra de 74 alimentos que permiten ofrecerles variedad de refrigerios a los estudiantes. Este proceso fue adjudicado a 44 proveedores, 14 de ellos son nuevos y 22 que antes eran intermediarios pasarán a operar directamente con la entidad.
La licitación del almacenamiento, ensamble y distribución de los refrigerios participaron siete proponentes y hay cinco adjudicados.
De estos cinco proveedores, dos son nuevos en la prestación de este servicio. «Hubo un 31 por ciento de procesos finalmente firmados con oferentes que cumplen con todas las condiciones para llegar al 100 por ciento de los establecimientos educativos», informó la Secretaría de Educación.
La Alcaldía de Enrique Peñalosa definió que en esta ocasión la interventoría del programa de alimentación escolar realice por primera vez visitas de seguimiento y control permanente desde la producción de alimentos hasta la distribución en cada uno de los colegios.
Esta incluirá la vigilancia sanitaria, para asegurar que las condiciones exigidas en términos de calidad, inocuidad y aporte nutricional de las raciones sean cumplidas. Este proceso se encuentra actualmente en curso.
La interventoría al programa en 2017 será seleccionada mediante un proceso de concurso de méritos.
Este nuevo modelo de contratación iniciado en la ciudad busca promover la competencia y la pluralidad de oferentes, generar economías de escala, eliminar costos de transacción, y ofrecer la oportunidad de compartir conocimientos entre diferentes entidades públicas.
«Típicamente lo que pasaba era que el Distrito contrataba con operadores que compraban los alimentos, los almacenaban y los distribuían. Nosotros dividimos esto en dos, y con esto lo que estamos haciendo es quitar intermediarios que generan costos y que adicionalmente hacen que no tengamos la misma participación de todos los productores de alimentos», concluyó María Margarita Zuleta, directora de Colombia Compra Eficiente.
Esta es una de las raciones que le están dando a los niños quienes manejaban el suministro de alimentos, para apropiarse de millonarios recursos.
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