La reconocida bióloga, rectora de la universidad EAN y experta en diversidad de género y medio ambiente, se reunió durante dos horas con un grupo de 90 internos de la cárcel distrital de varones y anexo de mujeres con quienes habló sobre temas como el talento y la libertad.
Rafael Camargo
La reconocida bióloga, rectora de la universidad EAN y experta en diversidad de género y medio ambiente, se reunió durante dos horas con un grupo de 90 internos de la cárcel distrital de varones y anexo de mujeres con quienes habló sobre temas como el talento y la libertad.
En la charla liderada por la secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia, Baptiste les compartió experiencias sobre su vida y les contó cómo se sintió prisionera durante 35 años de categorías anatómicas socialmente aceptadasque diferencian a un hombre y a una mujer.
«Nos iría muy bien ser libres, sobre todo en la cabeza»
Brigitte Baptiste se señala la cabeza y dice que es ahí donde residen los pensamientos y limitaciones que nos ponemos. Y les explicó que «la mayoría de los problemas están es acá, es porque uno no es honesto consigo mismo o consigo misma, o porque uno no sabe, o porque uno no explora, y siempre está, porque lo han educado así, capturado por las ideas de los demás».
Desde su perspectiva, la bióloga explicó que el ser humano encuentra la libertad cuando es capaz de ser honesto con las personas que ama. «Nos iría muy bien ser libres, sobre todo aquí -dice señalando de nuevo la cabeza- y yo sé lo que significa, lo que estoy diciendo, porque es acá donde uno le encuentra sentido a las cosas».
Por eso, durante el diálogo que estableció con el auditorio, les recalcó que el talento está presente en cada uno de ellos, y que pueden realizar actos liberadores, solo se requiere que exploren las posibilidades internas que tienen.
«El talento se presenta de formas misteriosas y maravillosas, todos acá, cada uno de ustedes, y como veo que son jóvenes, tienen un talento impresionante, y ese talento hay que desplegarlo, hay que desarrollarlo, con el tiempo, de la forma que sea», señaló Baptiste.
Johana Rozo, una mujer privada de la libertad, destacó los aportes del encuentro con Baptiste, «esta charla fue transformadora por el valor que tuvo de decidir lo que quería ser. Nos demuestra que todos podemos tener esa fuerza para ser lo que queremos y que no hay límite para eso».
Rozo cuenta que ha encontrado refugio a sus días de privación de la libertad en la biblioteca. Desde este lugar se encarga de promover la lectura en el pabellón de mujeres.
La biblioteca de la Cárcel Distrital, una de las 24 que tiene BiblioRed en la ciudad, tiene cerca de 7.000 libros catalogados y en tres años los privados de la libertad hicieron al menos 8.700 préstamos de lectura como parte de los servicios que se prestan en ese centro de reclusión.
El secretario de Cultura, Recreación y Deporte, Nicolás Montero, los motivó para que utilicen los servicios de BiblioRed en la cárcel. «Lo que ustedes están haciendo aquí en la biblioteca se está viendo y se está volviendo un referente porque la lectura es un vínculo sobre cómo vemos el mundo; ustedes son muy importantes para el trabajo que hacemos de promoción de la lectura, incluso si me quieren escribir explicando qué significa para ustedes leer, yo estaría muy emocionado».
Natalia Muñoz Labajo, subsecretaria de Acceso a la Justicia de la Secretaría de Seguridad, dijo que «nuestra apuesta es apuntarle a un proceso restaurativo. Lo que se quiere es generar segundas oportunidades, dar elementos para que eso pueda abrir ventanas hacia la cultura, hacia la expansión de los límites, hacia el entendimiento de nuevos enfoques y nuevas miradas para las personas que están privadas de la libertad».
«Cada uno de ustedes tiene un talento impresionante que debe irse desplegando y desarrollando»,expresó.
La Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia, en asocio con la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte y BibloRed, invita periódicamente a la Cárcel Distrital a personalidades de la literatura, las artes, la cultura y el periodismo; han estado Alejandro Gaviria, Piedad Bonet, Alessandro Angulo, Alberto Salcedo Ramos, Pilar Quintero, entre otros.
La cárcel distrital de varones y anexo de mujeres la única en Colombia y fue la primera en Sudamérica en obtener la acreditación internacional de la Asociación Americana de Correccionales (ACA), por las buenas prácticas implementadas para la atención de los privados de la libertad, así como las buenas condiciones para sus funcionarios.