El país clama por una seria motivación, al utilizar avión oficial, con gasolina pagada por todos los colombianos, además de romper normas de cuarentena, poniendo en peligro, las gentes mismas de la Isla, donde la pandemia aún es controlable.
Néstor Raúl Charrupí Jiménez
Expresidente del Tribunal Superior de Popayán
Everth Hawkins; así se llama el gobernador de San Andrés y Providencia, que la fiscalía en el día de ayer 3 de julio, solicitó audiencia de imputación de cargos.
Sin embargo, tal imputación viene precedida de un hecho, que eventualmente suscita suspicacias, como es el ya famoso, imprudente paseo, sin ton ni son, realizados por el Fiscal y el Contralor, a la Isla de San Andrés y Providencia.
Ante el elocuente requerimiento colectivo, para que expliquen el motivo de esa fortuita visita a las susodichas islas, solo han respondido malhumorado y con prepotencia, como el Contralor o con argumentos efectistas sensibleros, tales como que su hija es menor de edad adolescente y, que no salió del cuarto del hotel, vaya…obviando que acompañando a esta, venia otra menor, lo mismo que la madre de la primera.
El país clama por una seria motivación, al utilizar avión oficial, con gasolina pagada por todos los colombianos, además de romper normas de cuarentena, poniendo en peligro, las gentes mismas de la Isla, donde la pandemia aún es controlable. No se reunió con los fiscales subalternos de la fiscalía, que laboran en Isla, solo tenemos como motivos de su visita, una desteñida e insólita conferencia de prensa.
Ahora el gobernador de San Andrés manifiesta que el Fiscal lo quiere tomar a él, de «Chivo expiatorio», es decir de mampara para justificar tan criticado paseo, no sé si esto es cierto, o no, pero como argumento judicial de duda, es plenamente comprensible.
Si pudiera darle un consejo al juez de garantías, quien en últimas resuelve lo de la libertad del Sanandresano, le diría: mucho cuidado señor juez, que le vayan a meter «gato por liebre» y, termine usted ordenando privaciones a la libertad inspiradas en subrepticios motivaciones.
Con todo, lo mejor que le pudo pasar al gobernador de San Andrés, para efectos judiciales, incluida su libertad, fue este surrealista paseo, dado en las calamitosas condiciones en que se encuentra el país, y por tan alto funcionario, nada menos que el fiscal General de la Nación; siempre subyace la duda.
El fiscal Francisco Barbosa y el Contralor Carlos Felipe Córdoba, colegas y amigos.