Ex técnico de la selección Colombia femenina Didier Luna logro que se modificara el delito de acoso sexual a injuria por vía de hecho, situación que le representó una rebaja en su condena final y una sentencia excarcelable.
Rafael Camargo
Durante la lectura del fallo, el juez del caso le hizo un duro llamado de atención a Luna por intentar propasarse en diferentes oportunidades de Carolina Rozo y utilizar su cargo para presionarla después que ella le dejara en claro que no quería tener nada con él.
Ejecutó varios actos de presión en contra de ella con tal de conseguir favores sexuales no consentidos por la víctima, valiéndose de su superioridad, toda vez que ostentaba el cargo de director técnico de la Selección Femenina de Fútbol Sub-17, mientras ella ocupaba el cargo de fisioterapeuta», precisó el juez.
Recalcó: «Como quiera que el acoso sexual no dio resultados positivos en favor del aquí acusado, entonces este optó por sobrecargarla laboralmente, anular su participación en las reuniones y retirarla del campo, hasta el punto que la señora decidió retirarse de su trabajo; estos hechos ocurrieron entre el periodo comprendido entre diciembre de 2017 y marzo de 2018 aproximadamente».
HECHOS
En una primera audiencia, llevada a cabo en marzo del año pasado, el fiscal del caso aseguró que una de las frases que solía usar Luna con las jugadoras corresponde a «cómo estás de linda, quiero tener un hijo tuyo».
En agosto, el delegado del ente acusador sostuvo que Luna es el presunto responsable del delito de acoso sexual, ya que, según dijeron ante el estrado, los hechos se presentaron en diferentes escenarios y ocurrieron entre diciembre de 2017 y marzo de 2018.
«Hubo una primera etapa cuando se encontraban concentrados en el hotel Factory Inn en diciembre de 2017. El imputado dispensa a la víctima un trato plagado de galanteos, cumplidos en el oído, piropos en el oído, un contacto físico abrazándola con intensidad y fuerza», señaló la fiscal del caso.
En plena concentración del equipo le intentó robar un beso en la boca, hecho que fue rechazado por Carolina Rozo, quien es una de las que ha denunciado la conducta del entrenador, cuando estuvo al frente del seleccionado nacional.
El episodio del acoso relatado ante el estrado fue el que se hizo vía WhatsApp, en el que Luna le expresa a Rozo varias frases en las que usa términos como «preciosa, linda», que provocaron la incomodidad de la víctima. Esto ocurrió entre diciembre de 2017 y enero de 2018.
«Una tercera etapa de la conducta sucede en la sede de la Federación Colombiana de Fútbol en enero de 2018. Los asedios, las insinuaciones y las advertencias de que no se descuidara porque la iba a besar duraron varios días», dijo la fiscal ante el juez 15 de conocimiento.
En este periodo se presentó uno de los acosos más intimidantes hacia Rozo por parte del entonces estratega del combinado femenino sub 17.
«Ante la falta de reciprocidad, señaló la Fiscalía, Luna le expresa que sean amigos especiales, ya que él la puede llevar muy lejos en el fútbol, al mismo tiempo que le tocaba el escudo de la Federación Colombiana de Fútbol ubicado a la altura del seno izquierdo», detalló la delegada del búnker.
Didier Luna, era el terror al creerse todo un «play boy» aprovechando cualquier circunstancia como los goles, para tocar y coquetear expresan algunas personas que conocen el comportamiento del entrenador.
La fisioterapeuta Carolina Rozo junto a dos jugadoras.
Uno de los últimos entrenamientos de Didier Luna, a las jóvenes de la selección Colombia.