Noticias, TOP

La crisis de los medios de comunicación: ANTES DE LA PAUTA, SE PERDIÓ LA CREDIBILIDAD

Columnistas historiadores respetables, Profesores reconocidos, ahora tenemos contestatarios, faranduleros, críticos que no saben de lo que hablan, sin cultura, con odio.

 

 

Pedro Fuquen

Estamos ante la crisis en los medios de comunicación, en prensa, radio, televisión, en producción de ideas, que quedaron en la memoria.
Los medios se quejan, pero nadie ha advertido que los espacios de información, de la opinión, han desaparecido. Eran los preferidos de la opinión y los que compraban.
La radio, programas de participación de la gente, concurso, espectáculo. La hora Philips, patrocinó, figuras de la televisión, cantantes que terminaron famosos.
Locutores creíbles, famosos en las noticias, sin mencionar nombres, porque la memoria nos traiciona. Ya son del pasado.
Concursos para niños y grandes. Radioteatros con producción de radio impecable, sin improvisación.
Programas: La marcha de tiempo, La ley contra el hampa, lo mismo que novelas que enseñaban y divertían, grandes humoristas Montecristo, Ever Castro, Humberto Martínez, con toque de humor político, que reunían la familia alrededor del radio, en horario triple A.
Los chaparrines, La escuelita de doña Rita, Los Tolimenses, con patrocinios importantes y una alta  sintonía.
El tremendo juez y la tremenda corte, Aquí resolvemos su caso, Las mujeres en Caracol, Pregunte para saber.
En televisión, Yo y Tu, Compre la orquesta, La pareja más pareja, El club de la televisión, Animalandia, Noche de las estrellas, Quiere cacao, Operación Jajá, Cante aunque no cante, Yo sé quién sabe, lo que usted no sabe, Compre la orquesta, Naturalia.
Noticieros más culturales, con noticias, con información, que, reflejaban la actualidad del país. Además con solidaridad, por los problemas de la gente y la información útil.
Solidaridad, servicios a la comunidad, se cambió por telenovelas de narcos, programas sensibleros, sin participación de la gente, solo buscadores de intérpretes, cantantes.
Noticias que informaban y orientaban, no destruían y que se les hacía seguimiento, hasta que había solución.
La prensa escrita, situación similar, importaron ideas absurdas, que funcionan afuera, acabaron con la circulación y la credibilidad, borraron la fotografía y la cambiaron por diseños, titulares que no tienen sentido, la página local, columnas de economía, de política, informes de actualidad, páginas para niños, para la mujer.
Página femenina, página social, sería sin lagartos, desapareció, la sección de preguntas, que la gente consultaba, Buzón femenino, o IM contesta, secciones de salud, de consejos y preguntas, de acompañamiento.
Las aventuras de los domingos, Tarzan, Dick Tracy, Lorenzo y pepita, Mafalda, Tin tin, Don pancho y doña ramona, El fantasma, Benitin y eneas, los crucigramas, entre otros.
Suplementos literarios dominicales, eran de cultura, de historia, secciones de caricaturas de crítica sin insultos, política con Chapete, Osuna, Pepón, Merino.
Columnistas historiadores respetables, Profesores reconocidos, ahora tenemos contestatarios, faranduleros, críticos que no saben de lo que hablan, sin cultura, con odio.
Secciones que tenían clientela que compraba y veía, lo escuchaba, ahora los periodistas escriben para periodistas y toman partido. En política.
Los medios le endilgan la culpa a las redes sociales, que son diversión rápida y oportuna, sin validez profesional, sin credibilidad por que lo hace la gente del común, sin criterio y no periodistas profesionales, que han estudiado y se han preparado.
Los medios tenían solidaridad apoyo a la comunidad, buena información y orientación positiva, eso fue lo que cambió, no la pauta. No hay programas creativos con participación, no hay pauta.
Hay que decir que los colombianos, somos curiosos, nacimos y crecimos con la cultura de la radio, la información y la prensa tradicional, que perdió sus principios y objetivos, con las nuevas tecnologías y no se actualizaron, sino que acabaron con lo que era importante.
Ejemplos de programas, no se pueden poner todos, porque hay muchos.