Noticias, TOP

La economía colombiana: EL PEOR MOMENTO DEL SIGLO XXI

En las calles de las ciudades colombianas se volvió normal ver la gente vulnerable sobreviviendo de la caridad publica. Las ayudas gubernamentales llegaron a las grandes empresas y a la corrupción dejando en la miseria a la ciudadanía. Foto Junior Primicia Diario. 

 

 

La llegada de la pandemia del coronavirus a Colombia, el pasado 6 de marzo, cuando se conoció el primer caso de contagio, hasta hoy; 4 meses después, no solo creció exponencialmente, hasta sobrepasar la cifra las 2 millones 500 mil personas con la pandemia, además que se acerca la cifra a los 400 mil muertos.

La dinámica del coronavirus ha sido tan agresivo que alteró la vida cotidiana de los colombianos en los 32 departamentos del país, a pesar que en 120 municipios no se registran casos de Covid-19, afectando en más de 3 puntos el Producto Interno Bruto PIB.

En palabras del Ministro de Hacienda Alberto Carrasquilla, «la economía pasó de crecer a inicios del presente año de 4.1 por ciento al 1.1 por ciento». Un hecho, que para los gremios y todas las bancadas con asiento en el Congreso de la República, demuestra que la economía del país suramericano se desaceleró, que en el segundo semestre del año 2020 se agudizará, generando pobreza, desempleo, inseguridad, incertidumbre económica y social.

La constante en Colombia, desde la segunda semana del mes de marzo ha girado en torno a la cancelación de eventos, cierres de restaurantes, cines, hasta el cierre de la frontera colombo-ecuatoriana, el transporte aéreo y terrestre.

Para los analistas, es evidente que la pandemia se levanta hoy, como un «tsunami en los cuatro puntos cardinales del país, que se traduce en la pérdida de la confianza del consumidor, hasta llegar a menos 41.3 por ciento, en medio de dos días sin IVA, cuyo costo en materia de salud, se observa en la segunda semana del mes de julio, cuando los casos de contagio se disparó a cifras nunca antes vista, a lo largo de la cuarentena».

La  dinámica de las exportaciones dio un giro de 360 grados durante la cuarentena. Este renglón se disminuyó en menos 8.7 por ciento, al que se sumó la caída de los precios del petróleo. Este hecho, no estaba en las cuentas de nadie. Mucho menos del Gobierno del presidente Iván Duque, que se vio obligado a cerrar el sector turístico, donde se tenía una apuesta de internacionalización, aprovechando la posición geográfica del país, en la esquina de Suramérica (Dos océanos: Atlántico y Pacífico).

En opinión del presidente de la ANDI Bruce Mac Master, las cifras del comportamiento de la economía serán los peores en lo que va corrido del siglo XXI. No en vano, el índice del desempleo en el primer semestre en Colombia, llegó a una cifra histórica: 21.4 por ciento. Se estima, qué al cierre del año 2020, cerca de 12 millones de personas no tendrán trabajo.

Bajo este escenario, el presidente de FENALCO -aglutina al sector comercial- «el confinamiento de los colombianos de manera preventiva y obligatoria, generó una contracción en más de 3 puntos del Producto Interno Bruto PIB. El segundo semestre, será de mayor impacto, en términos de cidras en la economía», señaló.

Los datos del DANE evidenciaron -para los ciudadanos y el Gobierno del presidente Iván Duque-que en el mes de marzo, el crecimiento del país fue de -4.9 por ciento, sostuvo el presidente de ANIF Mauricio Santamaría, a través de su cuenta de twitter.

Este hecho demuestra la fragilidad de la economía colombiana, en tiempo de cuarentena. «Un impacto en la calidad de vida de los ciudadanos de cada una de las regiones del país, que además, observaron en los últimos días la declaratoria de alerta roja en materia de salud pública, en el caso de los departamentos de Córdoba, Nariño y la ciudad de Bogotá, donde la alcaldesa Claudia López, anunció la puesta en marcha de medidas de excepción, para salir al paso de la COVID-19 , que a esta altura del año es muy agresivo e impredecible en su comportamiento en el territorio.

Es evidente, que para los colombianos, que tiene el reto de cuidar la vida, bajo estrictos protocolos de bioseguridad, la pandemia parece ganar terreno al interior de las casas, los centros geriatricos -varios de ellos, con un contagio total en la ciudad de Bogotá- en un hecho muy similar como sucedió en España, Italia y Argentina.

«Los colombianos se están llenado de miedo: la esperanza desaparece con el paso de las horas, por la agresividad de la pandemia», señalaron los ciudadanos de las cinco regiones del país: Caribe, Andina, Amazónica, Pacífica y Llanos Orientales.

Mientras tanto la pobreza crece y la miseria se vuelve mayoritaria. Las ayudas gubernamentales no llegan a las familias vulnerables, sino por el contrario llegan a los sectores económicos más fuertes,o el bancario, industrial y empresarial.

«La pequeña empresa se quebró. La crisis económica de Colombia empieza a sentirse  como consecuencia de la espalda dada por el gobierno y la delincuencia se dispara como consecuencia de la hambruna que empezó a presentarse en todo el territorio colombiano, mientras que la corrupción sigue llenándose los bolsillos con la miseria del pueblo colombiano», dijo el catedrático universitario, Pedro Barco Paz.

La miseria se está extendiendo con invasiones  en diferentes regiones de Colombia. Una buena parte de colombianos ni siquiera tiene vivienda, ocupando las vías públicas.Gráfica captada en las calles de Bogotá. Menores consumiendo  alimentos de las basuras. Foto Junior. Primicia Diario.