Benkos Bioho

Manuel T. Bermúdez

La lucha de los afro será siempre tratar de  visibilizar las diferentes problemáticas que tienen que ver con su etnia en todos los lugares de la tierra.

Santiago de Cali no escapa a las actividades que propone actividades para visibilizar los esfuerzos que en ese aspecto se realizan y  por tanto son variadas las acciones que permitirán que nuevas voces se expresen  para reflexionar sobre la afrodescendencia.

Son acciones para rescatar del olvido a hombres y mujeres que han destacado por su lucha en contra de la desigualdad racial y reconocer a quienes la historia les ha vedado su espacio de figuración y reconocimiento.

Como figura sobresaliente para las comunidades afro está  un nombre: Benkos Biojó (Se escribe Bioho), pero son muchas las personas que nos saben quién era este personaje. En una pequeña ronda hecha, pregunté sobre el particular.

Es un nuevo cantante de Rap, me dijeron algunos. Un grupo musical –dijeron otros-, en realidad pocos sabían quién fue Benkos Bioho y por eso, voy a relatarles un poco de su historia.

Cuenta la leyenda que Benkos Bioho, fue un negro cimarrón traído del África occidental para engrosar las filas de los cientos de esclavos negros que llegaron a Colombia. Había sido secuestrado por un negrero portugués, Pedro Gómez Reynel, quien lo vendió al comerciante Juan de Palacios, quien a su vez lo vendió como esclavo a un español de nombre Alonso del Campo hacia el año de 1556 en Cartagena de Indias.

Perdida su libertad, también perdió su nombre y se lo españolizaron asignándole el de Domingo Biojó. Lo describen los historiadores como «un negro de porte imponente y excelente guerrero».

Puesto como boga en el río Magdalena debido a sus varios  intentos de fuga, la embarcación en la que viajaba naufragó y él aprovechó para huir. Fue recapturado, pero en 1599 escapó nuevamente y se internó, en compañía de 13 negros más,  en la zona pantanosa de la Matua al sur de Cartagena y de allí se fue a los Montes de María.

Como se entenderá, la búsqueda de los fugitivos se emprendió por parte de los propietarios pues a ellos, esos esclavos les costaba dinero y por eso los perseguían, pero más para mostrar ascendencia sobre ellos y no se difundieran esos sentimientos de libertad que ya se empezaban a evidenciar en los negros que esclavizaban para la minería o las faenas agrícolas.

Les contaba al comienzo que Benkos Bioho, era un negro «cimarrón». Este nombre inicialmente era dado al ganado que huía y quedaba sin control en los montes, posteriormente el nombre fue aplicado a los negros que se fugaban en busca de su libertad y se volvió de uso exclusivo para designar a los esclavos que huían.

Este cimarronaje se convirtió en su modelo de resistencia a la esclavitud y entonces nacieron los palenques o quilombos, que fueron los asentamientos que iban formando los esclavos fugados desde donde hicieron sus luchas por la libertad. Muchos fueron los negros fugados que iban a engrosar esos palenques. Bioho, fue proclamado rey y se convirtió en una pesadilla para las autoridades de la época y en especial para el gobernador de la Provincia de Cartagena.

No pudiendo derrotar a los cimarrones el Gobernador, Gerónimo de Suazo y Casasola, ofreció a Benkos un tratado de paz y reconociendo la autonomía de su palenque de la Matuna y aceptando que Bioho entrara a la ciudad armado y vestido a la española y por su parte el palenque se comprometía a no recibir más cimarrones ni a estimular más fugas de esclavos.

Una noche –dicen los historiadores- Bioho se trenzó en un combate con unos guardias que no le querían permitir entrar a la ciudad con armas y vestido a la usanza española. Se le subió el Bioho a Bioho y los guardas lo capturaron acusándolo de  arrogante, desacato a la autoridad y otros etcéteras.

El gobernador aprovechó la oportunidad de que lo tenía preso, le hizo un juicio de esos que siempre benefician al acusador y lo ahorcaron en la plaza pública de Cartagena un 16 de marzo de 1621 hace 390 años.

En la carta que el gobernador envió al Rey de España para justificar el ajusticiamiento de Bioho, decía que era un negro «belicoso y que con sus embustes y encantos se llevaba tras de sí a todas las naciones de Guinea que había en esta ciudad» y también como siempre, para que el rey no sintiera ninguna culpa le recordaba que «le había costado más de 200 ducados a la corona y que jamás había sido objeto de ningún castigo, ni él, ni los negros alzados que le acompañaban».

Sin ninguna duda Benkos Bioho representa la lucha por la libertad y por los derechos de los afrodescendientes y si bien es cierto no es el nombre de  un nuevo grupo cantante de Rap, sí podría ser la historia tema para una canción en homenaje a un héroe negro que han  tratado de borrar, los que escriben la historia para blancos.

Centro educativo en homenaje a Benkos Bioho