La Mayor de las Antillas también conserva con todas sus piezas y componentes originales, la locomotora La Junta.

Lázaro David Najarro Pujol/ Fotos autor

Museo Nacional del Ferrocarril y Fotos de La Habana

En el contexto del aniversario 503 de la fundación de la otrora villa de San Cristóbal de La Habana, erigida el 16 de noviembre de 1519, se recordó la creación del primer Ferrocarril en Cuba, Hispanoamérica y el Caribe (séptimo en el mundo), inaugurado en 1837, que cubría el tramo Habana-Bejucal (segundo país en América después de los Estados Unidos y se adelantó a España).

La locomotora tipo Rocket, de fabricación inglesa, realizó el primer viaje del ferrocarril cubano el domingo 19 de noviembre de 1837. Según el portal Cubaperiodistas.cu, a las ocho de la mañana, bajo el aguacero, el maquinista se situó frente a los mandos de la locomotora y comenzó a moverla poco a poco entre el bullicio y los estruendosos aplausos de los mirones. Luego la máquina aumentó la velocidad y algunos corrieron a los lados hasta donde pudieron para saludar a los primeros viajeros de la isla.

La Mayor de las Antillas también conserva, con el 97 por ciento sus piezas y componentes originales, la locomotora La Junta, construida en 1843, la cual constituye una joya del Ferrocarril en Cuba y el Mundo.

La Junta, de ruedas truck o boguie (base corta y ruedas extremadamente cerca unas de otras) es, sin duda, la más antigua conservada en Latinoamérica. Muchos la califican como Reina indiscutible de los rieles. Se encuentra en el Museo Nacional del Ferrocarril de Cuba (Monumento Nacional), en la Avenida Cristina y Arroyo, en La Habana Vieja.

La más original de las locomotoras, igualmente Monumento Nacional, la fabricó la firma estadounidense Roger Katchum y Groesvener de Patterson, Nueva Jersey. Deviene reliquia vinculada a la historia ferroviaria de Matanzas.

Llegó a isla -precisa la enciclopedia cubana- a principios de 1843. «Se puso a prueba, con pequeños viajes, los días 12 y 13 de mayo en la ciudad de Matanzas. Su primera presentación en público, fue el 16 de agosto, y el 1 de noviembre del propio año comenzó a prestar servicio regular de carga y pasajeros (…) Esta fue la locomotora insignia del Ferrocarril de Matanzas y ostentó el Nº 1 durante varias décadas».

En el Museo Nacional del Ferrocarril de Cuba también se puede constatar la locomotora cubana, calificada como la Princesa, única construida enteramente en la ínsula. Ambas evidencian la labor que se realiza para salvaguardar el patrimonio ferroviario de esta nación caribeña.

Y para preservar la memoria histórica la institución convocó al Concurso de Patrimonio Ferroviario en ocasión del aniversario 185 del primer Ferrocarril en Cuba e Hispanoamérica y los 20 años de la fundación del Museo.

La comisión congratuló la perseverancia, con récords nacionales, a la locomotora E1185 Mambisita, de la localidad de Rafael Freire, Holguín (con 140 años funcionando); a la Estación Ferroviaria de Bejucal (ubicada a 23 kilómetros al sur en línea recta del Capitolio de La Habana) y, a La Tornavía, de San Felipe, Mayabeque, la más antigua de Latinoamérica y el Caribe.

La provincia agramontina obtuvo el primer premio en investigación histórica con Camino de Hierro. Vial ferroviario Camagüey-Santa Cruz del Sur, de Lachy David y Mención especial a la reseña De la Asociación Deportiva de Cuba al Club Ferroviario, de Ricardo Acasio González Benítez, entregados en mitin con los trabajadores de la Empresa Reparadora de Equipos Ferroviarios, Unidad Básica Estatal Talleres Camagüey.

Si Cuba fue el primer país de América Latina que contó con ferrocarril y el séptimo en el mundo en utilizarlo, la villa de Santa María del Puerto del Príncipe, hoy Camagüey, se convirtió en el segundo territorio del país en poseer ese transporte, al poner en servicio en 1846 el tramo de línea Camagüey-Nuevitas.

Locomotora E-1180 Mambisita. Foto Museo Ferroviario de Cuba.

Estación Ferroviaria de Bejucal. Foto de La Habana