Primicia Diario
La Fiscalía General de la Nación y la Policía Nacional de Colombia han consolidado la hipótesis de que el magnicidio del exsenador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay fue ordenado por la estructura guerrillera de las disidencias de las FARC, la «Segunda Marquetalia», liderada por alias ‘Iván Márquez’. Sin embargo, hasta la fecha, «no existe un pronunciamiento público o reivindicación» de esta acción por parte de la organización armada.
La ausencia de una declaración por parte de la guerrilla añade un velo de complejidad al caso, aunque el aparato judicial avanza con evidencia sólida.
Conclusión de la Fiscalía
La hipótesis que vincula a la «Segunda Marquetalia» como la autora intelectual del crimen ha sido progresivamente reforzada por las autoridades, basándose en los avances de la investigación:
Desde las semanas posteriores al atentado, la principal hipótesis de la Fiscalía apuntó a un «crimen político» orquestado por las disidencias de las FARC.
La detención más reciente y considerada «de vital importancia» por la Policía es la de Simeón Pérez Marroquín, alias ‘El Viejo’. Según las autoridades, ‘El Viejo’ actuó como el «enlace clave» entre los determinadores (la guerrilla) y la red de sicarios que ejecutó el asesinato.
Las investigaciones sugieren que alias ‘El Viejo’ fue el encargado de contactar y coordinar a la red sicarial, al mando de alias ‘El Costeño’, que materializó el atentado el 7 de junio en Bogotá.
Con la captura de ‘El Viejo’, ya son nueve personas judicializadas por su presunta participación en el magnicidio. Los testimonios de los capturados se consideran «sólidos» y apuntan directamente a los miembros de la «Segunda Marquetalia» como autores intelectuales.
«Silencio» de la Guerrilla
A pesar de que el director de la Policía ha declarado públicamente que la «Segunda Marquetalia habría dado la orden para asesinar» al político, la estructura guerrillera ha mantenido un «mutismo total» sobre el caso.
La no reivindicación pública de la acción, contrastando con otros actos terroristas, ha sido un punto de análisis por expertos en conflicto, quienes han debatido si el crimen obedecía a una acción sicarial o a una orden política de alto nivel.
El abogado de la familia de Miguel Uribe Turbay ha denunciado a la «Segunda Marquetalia» y ha solicitado a la Fiscalía que el caso sea investigado como «crimen de lesa humanidad», buscando obtener verdad, justicia y garantías de no repetición.
La investigación judicial continúa, y se espera que las pruebas consolidadas conduzcan a la emisión de órdenes de captura y acusaciones formales contra los líderes de la «Segunda Marquetalia» señalados como los determinadores del crimen, muchos de los cuales, según las autoridades, se encuentran «refugiados en Venezuela».
