La Alcaldía de Bogotá impidió la proyectada ocupación del Parque Nacional por parte de comunidades indígenas, un hecho que derivó en señalamientos que algunos sectores interpretaron como estigmatizantes hacia dicha población.
Tras las polémicas declaraciones sobre reclutamiento indígena, voces ciudadanas cuestionan si estas representan una postura individual o la política oficial de la Alcaldía de Bogotá. El rechazo a la estigmatización por origen étnico se hace sentir.
La controversia se ha encendido en Bogotá tras las declaraciones del secretario de Seguridad del distrito, César Restrepo, sobre un presunto «reclutamiento» de niños para la guardia indígena asentada en las cercanías del Parque Nacional. Estas afirmaciones han generado un fuerte rechazo por parte de la Defensoría del Pueblo, que ha emitido un comunicado expresando su preocupación por la estigmatización que implican dichas declaraciones hacia la comunidad indígena presente en la capital.
El debate surge en un contexto donde la presencia de comunidades indígenas en Bogotá, particularmente en zonas como el Parque Nacional, ha sido objeto de atención y, en ocasiones, de tensiones. Las afirmaciones del secretario de Seguridad han sido interpretadas por diversos sectores como una generalización que podría alimentar la discriminación y la estigmatización hacia una población vulnerable.
La Defensoría del Pueblo, al rechazar categóricamente las declaraciones, se suma a las voces que exigen un tratamiento respetuoso y diferenciado hacia las comunidades indígenas, recordando la importancia de comprender sus dinámicas culturales y organizativas sin caer en señalamientos que puedan promover la xenofobia o el prejuicio. Este incidente pone de manifiesto la necesidad de un diálogo informado y sensible entre las autoridades distritales y las comunidades indígenas en Bogotá.
La Defensora del Pueblo, Iris Marín Ortiz, alzó su voz en defensa de las comunidades indígenas, rechazando la estigmatización de la que fueron objeto por parte del secretario de Gobierno del distrito, César Restrepo, vocero de la administración local. Su intervención subraya la preocupación por el tratamiento respetuoso y diferenciado que merecen estas poblaciones ancestrales en la capital.