Opinión, TOP

Crónica de Gardeazabal: EL PRINCIPIO DEL FIN

 

Gustavo Álvarez Gardeazábal

El Porce

Trump  se posesionó  como presidente de los Estados Unidos. Historiadores y  analistas del futuro topan frente a una disyuntiva.

Pueden señalar el día final del progresismo y las libertades controladas o más bien como el comienzo de la dictadura de los tecnócratas.

Se puede escribir que  se inicia el gobierno de la plutocracia para librar la guerra con China, que ya no será a bombazos sino económica.

Pero también que  termina el respeto por el derecho internacional porque se declara la vigencia del imperio norteamericano y solo se respetará o temerá la voluntad y el criterio del emperador. Todo eso y mucho más es posible.

El mundo se ha acelerado vertiginosamente hacia el futuro tecnológico y la normas y costumbres que nos rigieron desde cuando comenzó la industrialización, han ido quedando derogadas con los algoritmos.

Trump no va a redactar el nuevo ordenamiento. Lo impondrá adueñándose de Groenlandia o sancionando con aranceles a quienes le disgusten a él o a sus super ricos que le acompañan.

Ajustarse a este  nuevo ritmo le puede costar muy caro a Europa y costosísimo a todos los inmigrantes y a los débiles a quienes les garantiza esclavitud a cambio de  sobrevivir.

Algunos sufrirán a rejo limpio su venganza o su rencor. Vendrá entonces a adueñarse del Canal de Panamá porque no le perdonan a ese país que haya licitado el manejo de los puertos de Colón y de Ciudad de Panamá y se los hayan adjudicado a empresas chinas.

A Colombia la volverán a descertificar y le traspapelarán los 600 millones anuales que le daban de limosna para combatir el narcotráfico y sostener helicópteros y cuarteles.

Pero también pueden reforzar su presencia en las 7 bases norteamericanas en territorio colombiano y, por qué no, meterse hasta el cuello en el manejo de nuestra política criminal y hasta en el menudeo de los contratistas que gobiernan y legislan.

Es el principio del fin de una era. Y el comienzo de un huracán. Ojalá podamos seguirlo contando.