El abogado Jaime Granados encabeza la defensa del expresidente Uribe

Jaime Granados acusa  a la jueza de haber cometido graves «errores de hecho y de derecho» al momento de dictar la sentencia.

Rafael Camargo Vásquez 

Judicial 

En un movimiento crucial para el futuro judicial del expresidente Álvaro Uribe Vélez, su equipo de abogados, encabezado por el penalista Jaime Granados, radicó hoy un recurso de apelación contra la condena de 12 años de prisión impuesta por la Jueza 44 de Bogotá.

El documento, de más de 900 páginas, acusa a la jueza de haber cometido graves «errores de hecho y de derecho» al momento de dictar la sentencia. La defensa busca, a través de esta apelación, que el Tribunal Superior de Bogotá anule el proceso en su totalidad o, en su defecto, absuelva al exmandatario de todos los cargos.

Los argumentos

La apelación se centra en cuestionar los pilares de la condena. Entre los puntos más destacados, la defensa argumenta que:

• Se cuestionan las pruebas: La validez de las grabaciones con «relojes espía» presentadas por Deyanira Gómez, exesposa del testigo Juan Guillermo Monsalve, es puesta en tela de juicio. La defensa argumenta que estas pruebas carecen de la autenticidad y legalidad necesarias.
• Ausencia de soborno: El recurso insiste en que no existen pruebas directas o indirectas que demuestren que Uribe le solicitó a Monsalve que cambiara su versión o que mintiera en el proceso.
• Conducta de Diego Cadena: Los abogados de Uribe argumentan que las acciones del abogado Diego Cadena, también condenado en este caso, no pueden atribuirse directamente al expresidente. Afirman que la sentencia se basa en «conjeturas subjetivas» sin un respaldo probatorio suficiente.
• Petición de libertad: La apelación también solicita que se revoque la detención domiciliaria de Uribe, argumentando que no hay justificación para que permanezca detenido mientras se resuelve la apelación.

Este recurso, sumado a la apelación que también presentó la Procuraduría, será analizado por la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá. La decisión de esta instancia será determinante para el futuro judicial del expresidente, en uno de los casos más mediáticos y polarizantes en la historia reciente del país.