Miguel Ángel Barreto, es investigado por la Corte Suprema de Justicia, por los presuntos delitos de concierto para delinquir y cohecho propio.

Javier Sánchez

Bogotá, Colombia

 El telón del escandaloso entramado de corrupción conocido como ‘Las Marionetas’ vuelve a levantarse, esta vez con la Corte Suprema de Justicia abriendo una investigación formal contra el senador conservador Miguel Ángel Barreto. Este caso, que ha conmocionado al panorama político colombiano, continúa revelando una sofisticada red de sobornos y contratos amañados que se extiende y salpica a destacadas figuras del Congreso.

El Caso ‘Las Marionetas’

La sombra de la corrupción sobre recursos públicos se hizo visible gracias a una minuciosa investigación de la Fiscalía General de la Nación. Se descubrió una organización criminal dedicada a la apropiación de fondos estatales mediante la manipulación de procesos contractuales en diversas entidades públicas.

La red era presuntamente liderada por el fallecido senador liberal Mario Alberto Castaño Pérez, quien operaba como el epicentro de la organización. Su prematura muerte en noviembre de 2022, mientras enfrentaba la justicia, no detuvo el curso de las investigaciones que lo señalaban de usar su influencia política para direccionar la adjudicación de millonarios contratos.

El modus operandi de ‘Las Marionetas’ era tan simple como audaz: se exigía un porcentaje («coima») del valor de los contratos públicos a cambio de asegurar su adjudicación. Estos acuerdos ilícitos se tejían en variados sectores, desde infraestructura y tecnología hasta educación, afectando proyectos financiados con recursos nacionales y regionales. Los montos desviados se cuentan por miles de millones de pesos.

La red extendía sus tentáculos a múltiples entidades públicas, operando tanto a nivel nacional como en territorios específicos. El Departamento para la Prosperidad Social (DPS) ha sido una de las entidades mencionadas, junto con administraciones municipales, especialmente en departamentos del Eje Cafetero y el suroccidente del país.

El entramado iba más allá de los círculos políticos. Involucraba a intermediarios, empresarios y funcionarios públicos. Numerosos colaboradores han sido capturados y judicializados, y algunos de ellos se han convertido en piezas clave para la Fiscalía, aportando testimonios que desenmascaran la operación.

Bajo la Lupa Judicial

Ahora, la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia ha puesto su foco en el senador Miguel Ángel Barreto, abriendo una investigación formal por los presuntos delitos de concierto para delinquir y cohecho propio.

Las indagaciones preliminares sugieren que Barreto habría participado activamente en la red de ‘Las Marionetas’, influyendo en el direccionamiento de contratos. Aunque los detalles precisos de su presunta implicación son objeto de investigación, las acusaciones giran en torno a la recepción de dinero o beneficios a cambio de su intervención.

La Corte ha fundamentado esta investigación en un cúmulo de pruebas que incluyen interceptaciones telefónicas, reveladores testimonios de colaboradores cercanos al fallecido Mario Castaño, y evidencia documental que tejería una conexión directa del senador con el esquema corrupto.

Proceso en Curso

La apertura de esta investigación formal contra Miguel Ángel Barreto es un paso significativo. Significa que la Sala de Instrucción de la Corte Suprema ha encontrado elementos suficientes para profundizar en la recolección de pruebas y determinar si hay méritos para un eventual llamamiento a juicio. Este proceso, que se mantiene en fase reservada para proteger la integridad de la evidencia, reafirma el compromiso de las autoridades judiciales colombianas en la lucha implacable contra la corrupción.

El caso ‘Las Marionetas’ se erige como un emblemático ejemplo de la capacidad del sistema judicial para investigar y procesar a figuras públicas de alto nivel, incluso extendiendo sus alcances post mortem, como en el caso de Mario Castaño, y afectando a congresistas en ejercicio que presuntamente habrían abusado de su poder.