El Gobierno de Nicaragua negó la solicitud de extradición de Carlos Ramón González, exdirector del Departamento Administrativo de la Presidencia, DAPRE, de Colombia,confirmando que le otorgó asilo político.

Carlos Ramón González, exdirector del DAPRE, se le «voló» a la justicia.

Marina Sinisterra Q

Judicial

En un revés para la justicia colombiana, el gobierno de Nicaragua ha rechazado la solicitud de extradición de Carlos Ramón González, exdirector del DAPRE, una de las figuras clave en el escándalo de corrupción de la UNGRD. La decisión, que se conoció recientemente, se fundamenta en que Nicaragua le ha otorgado asilo político a González.

Esta medida de protección legal impide su entrega a las autoridades colombianas, complicando la investigación en su contra.

Implicaciones

González es señalado por la Fiscalía colombiana como el presunto cerebro detrás del entramado de sobornos de la UNGRD. Según el testimonio de Sneyder Pinilla, el exfuncionario habría orquestado un plan para desviar fondos de la entidad con el fin de asegurar apoyo político para las reformas del Gobierno. La Fiscalía le ha imputado cargos por peculado por apropiación, cohecho por dar u ofrecer, y lavado de activos.

Carlos Ramón González ya contaba con una orden de captura emitida por un magistrado del Tribunal Superior de Bogotá. Sin embargo, se ha mantenido prófugo desde entonces, evadiendo la acción de la justicia colombiana.

La negativa de extradición intensifica la tensión en las ya complejas relaciones diplomáticas entre Colombia y Nicaragua. A pesar de que la Cancillería colombiana había solicitado formalmente el inicio del proceso de extradición, la decisión de otorgar asilo trunca cualquier posibilidad de cooperación judicial.

Colombia ha solicitado una circular roja de la Interpol para la captura internacional de González. No obstante, su estatus de asilado podría dificultar su detención en otros países que respeten la figura del asilo político.

Analistas señalan que este caso subraya los desafíos que enfrenta la justicia en el ámbito internacional, especialmente cuando los implicados buscan refugio en naciones con posturas políticas divergentes.

Carlos Ramón González ha sido señalado como una figura central en varios casos de corrupción, principalmente en el marco del escándalo de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).

Caso de la UNGRD

Carlos Ramón González es acusado por la Fiscalía General de la Nación de ser el cerebro detrás del plan de sobornos a congresistas. Según testimonios de Sneyder Pinilla y Olmedo López, González habría dado instrucciones para desviar fondos de la UNGRD y entregarlos a congresistas con el fin de obtener apoyo para las reformas del Gobierno.

La Fiscalía le imputó formalmente los delitos de cohecho por dar u ofrecer, peculado por apropiación en favor de terceros y lavado de activos. Se alega que solicitó a Olmedo López la entrega de 3.000 millones de pesos en efectivo a Iván Name y 1.000 millones de pesos en efectivo a Andrés Calle, ambos expresidentes del Senado y la Cámara, respectivamente.

Los testimonios de Pinilla y López son cruciales en la investigación. Pinilla ha señalado a González como la persona que ordenó el pago de sobornos. Por su parte, Olmedo López ha afirmado que González tenía un rol de jerarquía y que le dio instrucciones precisas para la entrega de los dineros, incluyendo reuniones en la Casa de Nariño para definir montos y rutas de pago.

Estatus judicial 

Carlos Ramón González es considerado un prófugo de la justicia colombiana. Un magistrado del Tribunal Superior de Bogotá emitió una orden de captura en su contra, la cual no ha sido ejecutada.

Aunque la extradición ha sido negada, Colombia solicitó una circular roja de la Interpol para su captura. Sin embargo, su estatus de asilado político podría complicar su detención en otros países.