Internacional, TOP

Oriente Medio en Alerta Máxima: ISRAEL ATACA IRÁN EN OPERACIÓN «LEÓN ASCENDENTE»

Israel ha lanzado un ataque directo contra Irán

Teherán/Jerusalén.

En un giro dramático que eleva las tensiones a un punto crítico en Oriente Medio, Israel ha lanzado un ataque directo contra Irán en la madrugada de hoy viernes, según confirmó el ministro de Defensa israelí. La ofensiva, denominada «Operación León Ascendente», busca, según Tel Aviv, «repeler la amenaza iraní a la propia supervivencia de Israel». El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha sido enfático al asegurar que esta operación «continuará hasta eliminar la amenaza de Irán» y se extenderá «los días que sean necesarios», presagiando una escalada sostenida.

Reportes iniciales desde Irán, aunque limitados por la televisión estatal, confirman «fuertes sonidos de explosiones» en Teherán y sus alrededores, lo que sugiere la magnitud del impacto del ataque. En una medida sin precedentes ante la agresión, Israel ha procedido a cerrar su espacio aéreo indefinidamente, lo que fue replicado casi de inmediato por Irak, que también suspendió todo su tráfico aéreo.

El Ministerio de Defensa israelí ha precisado que los objetivos primordiales de esta operación fueron «objetivos nucleares y militares» dentro del territorio iraní, describiéndola como un «ataque preventivo» destinado a neutralizar una potencial ofensiva con misiles y drones por parte de Teherán. Aunque los detalles sobre los blancos específicos y la magnitud de los daños aún son escasos, la naturaleza de los objetivos subraya la gravedad de la confrontación.

Reacciones Globales y el Fantasma de una Guerra Regional

La agresión ha desatado una ola de reacciones internacionales y temores de una guerra total en Oriente Próximo. Israel ha declarado un estado de emergencia especial en todo su territorio, imponiendo restricciones severas que incluyen la suspensión de clases, eventos públicos y actividades laborales no esenciales. La respuesta de la comunidad internacional no se hizo esperar: Estados Unidos ha negado categóricamente cualquier participación o conocimiento previo del ataque. El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, afirmó en la madrugada que «Estados Unidos no está envuelto en el ataque contra Irán llevado a cabo por Israel», aunque figuras como el exvicepresidente Mike Pence expresaron en redes sociales su «apoyo inquebrantable» a las fuerzas israelíes.

La expectación ahora se centra en la respuesta de Irán, que se prevé será rápida y contundente. La Guardia Revolucionaria Iraní ya había advertido de represalias en caso de agresión, y analistas internacionales temen una «gran descarga de misiles balísticos», similar a escaladas anteriores. Este ataque se produce en un momento de extremas tensiones, intensificadas por la reciente declaración de la Junta del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) sobre el incumplimiento de Irán en sus obligaciones de no proliferación nuclear, lo que podría haber servido como un catalizador para la acción israelí.

Un Conflicto Latente que Explota: Antecedentes y Consecuencias

Las hostilidades de hoy son la culminación de años de crecientes tensiones entre Israel e Irán, marcadas por acusaciones mutuas de injerencia y una serie de ataques indirectos o limitados. El programa nuclear de Irán es la principal preocupación estratégica para Israel, que lo considera una amenaza existencial a su seguridad. Este ha sido un punto de fricción constante, con Teherán insistiendo en la naturaleza pacífica de su programa, mientras que Israel y sus aliados sospechan de una búsqueda encubierta de armamento nuclear.

La explosión de este conflicto se da en un momento delicado para las conversaciones nucleares entre Estados Unidos e Irán, cuyo futuro ahora pende de un hilo. Lo que antes eran negociaciones complejas, se han transformado en un escenario impredecible tras este ataque directo. La comunidad internacional observa con contención, consciente de que cualquier paso en falso podría desencadenar una crisis regional de proporciones incalculables, con implicaciones que trascenderían las fronteras de Oriente Medio.