Cepeda y Corcho se disputan la candidatura del Pacto Histórico
Javier Sánchez
Política
La maquinaria del Pacto Histórico, que en junio de 2025 resolvió fusionarse en un único partido, enfrenta turbulencias internas a pocos días de su consulta decisiva, fijada para el 26 de octubre. El objetivo del movimiento es trascendental: elegir a su precandidato presidencial para 2026, definir las listas al Congreso y, crucialmente, formalizar su estructura política como una fuerza unificada.
El Retiro de Quintero
La imagen de solidez del Pacto sufrió un revés dramático con la sorpresiva renuncia de Daniel Quintero a la contienda. El exalcalde de Medellín, figura cercana al presidente Petro pero de escasa militancia tradicional, abandonó la carrera alegando una supuesta «falta de garantías» y que el Consejo Nacional Electoral (CNE) y la Registraduría cambiaron las reglas. Según Quintero, la consulta se transformó ilegalmente en una «interpartidista», inhabilitándolo para participar en una consulta más amplia posterior.
Pese a este cisma, dos figuras centrales de la izquierda se mantienen firmes:
Iván Cepeda: El senador, emblema de la izquierda militante, defiende la continuidad del proceso, encarnando la disciplina del movimiento.
Carolina Corcho: La exministra de Salud, sin experiencia electoral, utiliza la consulta como plataforma para ganar capital político y visibilidad.
Desafío Logístico
Desde la Casa de Nariño, el presidente Gustavo Petro elevó la tensión, calificando las supuestas maniobras electorales como un «golpe antidemocrático» que busca desbaratar a la fuerza la consulta de su colectividad. A pesar de la polémica, el Pacto Histórico confirmó la realización de la votación en la fecha prevista, el 26 de octubre, con Petro asegurando públicamente que participará.
El retiro de Quintero plantea, además, un desafío logístico inmediato: la Registraduría Nacional anunció que, dada la premura, no será posible reimprimir los tarjetones, lo que podría generar confusión en las urnas.
Analistas coinciden en que la salida de Quintero y el ruido institucional debilitan momentáneamente al Pacto. Sin embargo, recalcan que, más allá de la puja presidencial, la consulta es un paso inevitable para la consolidación estructural del movimiento como un partido único, fundamental para su estrategia en el panorama electoral de 2026.
Daniel Quintero, renunció a la consulta del Pacto Histórico