El astronauta de la NASA Steve Swanson se ejercita en la cinta de correr de resistencia externa con soporte de carga operacional combinada
Universo
Un día en el espacio es una experiencia que desafía nuestra comprensión cotidiana del tiempo, la gravedad y la rutina. Para los astronautas a bordo de la Estación Espacial Internacional (EEI), un día típico está meticulosamente planificado para maximizar la productividad y mantener su bienestar en un entorno único y potencialmente hostil.
Amanecer y Atardecer Constantes:
Una de las diferencias más notables con la vida en la Tierra es la frecuencia de los amaneceres y atardeceres. Orbitando la Tierra aproximadamente cada 90 minutos, los astronautas experimentan alrededor de 16 amaneceres y 16 atardeceres en un período de 24 horas terrestres. Esto requiere un manejo cuidadoso de los ciclos de sueño y vigilia para evitar la desorientación. La EEI opera bajo la Hora Media de Greenwich (GMT) para coordinar las actividades y las comunicaciones con el control de la misión en Tierra.
Rutina Diaria:
La jornada laboral de un astronauta suele comenzar con un período de planificación y comunicación con el control de la misión. Esto incluye revisar la agenda del día, coordinar tareas y recibir instrucciones.
Trabajo Científico:
Una parte significativa del día se dedica a la realización de experimentos científicos en diversas disciplinas, como biología, física, medicina y ciencias de la Tierra. Estos experimentos aprovechan la microgravedad para obtener conocimientos que serían imposibles de alcanzar en la Tierra. Los astronautas pueden pasar horas configurando equipos, recolectando datos, realizando mantenimiento y documentando sus hallazgos.
Mantenimiento y Reparaciones:
La EEI es una compleja máquina en constante movimiento, y el mantenimiento es una tarea continua. Los astronautas realizan inspecciones de rutina, reparan equipos averiados, reemplazan componentes y realizan tareas de mantenimiento preventivo para garantizar el funcionamiento seguro y eficiente de la estación. Esto puede incluir actividades dentro y fuera de la estación.
Ejercicio Físico
La microgravedad tiene efectos perjudiciales en el cuerpo humano, como la pérdida de masa ósea y muscular. Por lo tanto, el ejercicio diario es crucial. Los astronautas dedican al menos dos horas al día a realizar ejercicio en equipos especializados diseñados para el entorno de ingravidez, como cintas de correr con arneses, bicicletas estáticas sin asiento y aparatos de levantamiento de pesas con resistencia al vacío.
Comida y Tiempo Personal
Las comidas están programadas y los alimentos suelen ser pre-envasados y deshidratados, que se rehidratan con agua. El tiempo para comer es una oportunidad para socializar con los compañeros de tripulación. A pesar de la apretada agenda, se asigna tiempo personal para actividades como leer, escuchar música, ver películas, comunicarse con la familia en la Tierra o simplemente observar el impresionante panorama del planeta desde las ventanas de la cúpula.
Sueño
El sueño en el espacio requiere precauciones especiales. Los astronautas duermen en sacos de dormir sujetos a las paredes de sus pequeños camarotes para evitar flotar libremente. El ruido constante de los sistemas de soporte vital de la estación también puede ser un factor, por lo que a menudo se utilizan tapones para los oídos.
Comunicación con la Tierra
Mantener el contacto con el control de la misión y las familias es vital para el bienestar psicológico de los astronautas. Se programan comunicaciones regulares por voz y video, lo que les permite mantenerse conectados con sus seres queridos y recibir apoyo del equipo en Tierra.