La placa de uno de los vehículos del procurador está rotulada con las letras CVY. Esto en el argot popular y el de los funcionarios corruptos en el país significa: «cómo voy yo» es decir, como se entra en el juego para sacar provecho de una gestión ilícita.Foto Semana.com
Rafael Camargo
Especial
Primicia Diario
Los carros en que se movilizaba el provinciano Ulpiano Jovel Muñoz, quien cuando llegó a Bogotá, llegó desempleado y sus amigos le colaboraban para el transporte publico y su alimentación. En los últimos años se convirtió en uno de los funcionarios amigos del Procurador General Alejandro Ordóñez .
Ahora empezaron a llegar múltiples acusaciones donde señalan que Ulpiano Jovel Muñoz, quien presuntamente tenía montada una organización que realizaba tráfico de influencias. Las autoridades iniciaron una investigación exhaustiva para establecer la veracidad de las mismas.
Hoy consultamos a varios funcionarios de la ProcuradurÍa que coincidieron en señalar su extrañeza por las acusaciones que se formulan contra el funcionario, si se tenía en cuanto que era una persona que aparentaba estrato seis en su comportamiento.
Hoy el provinciano Ulpiano Jovel Muñoz, se declara inocente de las acusaciones a pesar de las pruebas contundentes que tienen las autoridades judiciales contra el procurador judicial.
El procurador judicial Hernán Ulpiano Jovel Muñoz, se jactaba de ser «la mano derecha» del Procurador Alejandro Ordóñez, quien en las ultimas horas tras conocer las acusaciones de la fiscalía ordenó realizar una investigación para establecer la conducta disciplinaria de su subalterno.
DE ALTA GAMA A LA CÁRCEL
El procurador General de la Nación, Alejandro Ordóñez, calificó como una ‘vagabundería’ lo que sucedió con el procurador administrativo Hernán Ulpiano Jovel Muñoz implicado en actos de corrupción.
El procurador aseguró que al conocer este tipo de situaciones tomó cartas sobre el asunto y apartó de su cargo al funcionario del Ministerio Público capturado porque al parecer recibió dineros para evitar investigaciones contra el exgobernador de Cundinamarca.
«Firmé la insubsistencia de ese funcionario, ya no es procurador; yo creo que esto es un hecho escandaloso inadmisible, intolerable y la Procuraduría no puede amparar semejantes hechos por parte de los funcionarios públicos, pero aún más de un funcionario de la Procuraduría», afirmó el procurador.
De igual forma el Procurador consideró que este tipo de actos no pueden ser admitidos por nadie y menos por parte de la entidad que vigila y defiende los intereses del patrimonio público.
«Se iniciaron procesos disciplinarios; he solicitado al procurador el traslado de las pruebas, para iniciar un proceso verbal contra el exprocurador, y desde luego contra el señor gobernador sobre los actos de concusión, son hechos que no pueden admitirse y sobre los cuales debe caerse todo el peso de la ley, eso en palabras más, es una vagabundería que no la voy a tolerar», agregó el procurador General.