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10 Consejos Que Nos Enseña: LA MUJER MÁS FEA DEL MUNDO

Muchos la conocen como la mujer más fea del mundo pero la verdad es que desde que Lizzie Velasquez decidió contar su experiencia y convertir sus defectos físicos (su extrema delgadez y ceguera en un ojo) en la mayor de sus fortalezas, muchas personas alrededor del mundo se han inspirado con su experiencia de vida reconociendo que lo realmente importante es lo tenemos en el corazón.

 

 

 

 

 

 

Lizzie es una de las tan sólo dos personas afectadas en el mundo por una enfermedad desconocida que no le permite engordar, aunque tiene que comer 40 veces al día. Aunque mide 1.57 metros nunca ha podido pasar de los 30 kilogramos, lo que quiere decir que posee un índice corporal inferior a los 13 puntos, 18.5 es lo que como mínimo debería tener.
Aunque en el pasado vio vulnerada su personalidad cuando descubrió que en internet muchas personas opinaban cosas terribles sobre su apariencia física y la catalogaban como la ‘«La mujer más fea del mundo», hoy gracias a éstas, nosotros podemos aprender de sus experiencia con estos 10 hermosos consejos.

1. Las cosas simplemente pasan

Hay cosas que simplemente no podemos controlar. Cosas que pasan sin que podamos entenderlas o aceptarlas y que te hacen pensar que eres el culpable de tus vivencias y de lo que la gente opina de ti. Lizzie fue víctima de Bullying (matoneo) en redes sociales por parte de personas de todo el mundo que la juzgaban y la humillaban sin darse a la tarea de conocerla, pero ella aceptó que hay cosas y circunstancias que no podía controlar, cosas que simplemente pasan independientemente de lo bueno o lo malo que seas.

2. La salud es lo más importante

Cuántas veces nos quejamos frente al espejo por no parecernos a las cantantes o modelos que aparecen en las portadas de la revista. Vivimos pensando que nos falta ésto o aquello, hacemos dietas extremas con tal de seguir prototipos que creemos que debemos seguir, pero lo más importante y lo que no te has dado cuenta es que lo realmente valioso es saber qué clase de persona ves en ti. Eres más que una imagen, una cara y un cuerpo, y eso es lo que más debes cuidar…lo que proyectas en los demás. La belleza es efímera y pasajera y en algún momento se irá, pero la esencia esa sí que es para toda la vida.

3. Eres más de lo que la gente dice de ti

Tampoco puedes controlar lo que otros piensan de ti, pero sí lo que tú piensas de ti mismo. A menudo, cuando estamos bajos de energía, los ataques de otras personas nos hacen replantearnos muchas cosas sobre nuestra propia personalidad: ¿Es mi culpa? ¿Me lo merezco? ¿Soy una mala persona? etc, Pero lo que debes saber es que eres más que todo eso, no olvides que lo más importante es el valor y el respeto que te das a ti.

4. Odio con odio es una mala idea

Con la cabeza caliente nadie piensa bien, así que si te han ofendido y quieres devolverle a la persona un poco de su propia medicina, mejor piénsalo dos veces porque el único perjudicado serás tú. Pagar odio con odio u ofensa con ofensa sólo ampliara el círculo vicioso de mala energía y dolor. Respira, deja que tus hechos hablen por ti.

5. Que nadie te defina

Nadie puede definirte en palabras porque los seres humanos estamos en constante cambio y siempre tenemos la posibilidad de caernos pero también la oportunidad de volver a empezar. Que nadie te ponga restricciones, ni te digan que no eres capaz de lograr esto o aquello. No se puede agradar y complacer a todo el mundo, pero siempre podemos agradarnos a nosotros mismos.

6. Que tus logros y éxitos hablen por ti

Pruébese con hechos cuán equivocados estaban acerca de ti. Toma lo que te hace débil y arriésgate a ir más allá de tus propios límites. Esa, sólo esa, será la mejor revancha que puedes dar.

7. Ten cerca a tu familia

La familia es el apoyo más grande que tenemos, son nuestra fortaleza y nuestra fuente más confiable de apoyo. No nos juzgan, nos aceptan cual tal somos, no nos exigen nada y nos animan todo el tiempo a ser la mejor versión de nosotros mismos. Mantelos lo más cerca posible.

8. Haz de tu defecto tu fortaleza

Lizzie cambió las cosas, no se escondió en su habitación ni se negó a hacer una vida normal debido a su apariencia física. Ella tomó el coraje y la valentía para salir de su zona de confort, luchar contra el bullying y ser la vocera de los que en muchos casos no pueden hablar.

9. Agradece siempre

Siempre siempre recuerda ser agradecido, no busques más problemas en los problemas que ya tienes, por el contrario trata de animarte y buscar una solución. Estás  donde tienes que estar, estás haciendo lo que debes hacer. Agradece por el regalo de la vida y por la oportunidad de vivirla.

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Tampoco puedes controlar lo que otros piensan de ti, pero sí lo que tú piensas de ti mismo. A menudo, cuando estamos bajos de energía, los ataques de otras personas nos hacen replantearnos muchas cosas sobre nuestra propia personalidad: ¿Es mi culpa? ¿Me lo merezco? ¿Soy una mala persona? etc, Pero lo que debes saber es que eres más que todo eso, no olvides que lo más importante es el valor y el respeto que te das a ti.

La familia es el apoyo más grande que tenemos, son nuestra fortaleza y nuestra fuente más confiable de apoyo. No nos juzgan, nos aceptan cual tal somos, no nos exigen nada y nos animan todo el tiempo a ser la mejor versión de nosotros mismos. Mantelos lo más cerca posible.

La belleza es efímera y pasajera y en algún momento se irá, pero la esencia esa sí que es para toda la vida.