Colombia entra a debatir si valía la pena invertir una suma multimillonaria en donde los resultados fueron pobres

En Colombia se abrió el debate por el costo exagerado que demandó la Cumbre de las Américas que se acuerdo con algunos cálculos conservadores sobrepasa los doscientos millones de dólares.

Aunque las autoridades gubernamentales con timidez expresan que los gastos alcanzaron los 90 millones de dólares, otros calculan los dineros que ha venido desembolsando el gobierno desde hace un año cuando se adelantan los preparativos del encuentro continental.

“Más de 200  millones de dólares se han invertido en una reunión de tres días, donde fueron reprimidos los habitantes de Cartagena para evitar su movilización y presentar una ciudad sin problema alguno, cuando la realidad es todo lo contrario”, manifestó Orlando Ariel Manrique G., veedor ciudadano.

Hasta el expresidente de Colombia Álvaro Uribe calificó de derrochador a su sucesor, Juan Manuel Santos, por la manera de realizar la VI Cumbre de las Américas en Cartagena.

«Cumbres, como la cumbre de las Américas, se pueden (hacer) con menos derroche, hacer austeramente, más en un país pobre como el nuestro. Es un gobierno que va dando muestras de opulencia en todos sus aspectos«, manifestó Uribe.

El lunes Colombia volverá a la realidad de un pueblo con hambre, sin salud, educación  y sin servicios básicos, mientras que la dirigencia derrocha los dineros públicos en cantidades alarmantes.