Opinión

En Colombia: EL FUNERAL DE ABEJAS

En Colombia: EL FUNERAL DE ABEJAS

Jorge Giraldo Acevedo

Resulta increíble y causa alarma que en  todo el país se esté registrando el más grave funeral de abejas y la situación  la  ha denunciado la organización Colectivo Abejas Vivas; se  asegura que  en los últimos 4 años han muerto en Colombia,  por envenenamiento masivo con agrotóxicos,  cerca del 40% de abejas.
La situación es supremamente grave y,   aunque se presenta  en todo el territorio de  Colombia,   según los registros oficiales  es catastrófica en Iquira y  Calarcá, poblaciones de los departamentos del Huila y   Quindío, respectivamente.
La problemática en Colombia,   con  la industria apícola,  es la misma desde hace  muchísimos  años por  el  absurdo  envenenamiento masivo de las abejas.
En regiones del Huila y  Quindío  constantemente los apicultores vienen denunciando el envenenamiento de las abejas y otras especies; según ellos, por el uso inadecuado de agroquímicos que son utilizados en otros cultivos de fincas aledañas a los apiarios.  En los casos de la muerte de las abejas en Iquira y Calarcá  sucedió por el uso indiscriminado de agroquímicos aplicados en  cultivos  de cítricos. Es decir, el envenenamiento de abejas se presentó  por el uso incorrecto de pesticidas en algunos cultivos de  esas zonas colombianas.
Así la situación los apicultores del Huila,  Quindío y otras regiones del  país  deben enfrentar,  además de  los  problemas de la pandemia del coronavirus,   el «funeral apícola» que representa la muerte  de abejas.
El gremio apicultor y de las abejas y demás insectos polinizadores son víctimas del envenenamiento y  por  eso, ante las  políticas oficiales,  los apicultores colombiano están de luto siempre porque no hay  conciencia en la manera como se debe cuidar a estos valiosos animalitos; todavía existe gente, sin escrúpulo alguno,  que  considera a las abejas como  una plaga y fumiga  con plaguicidas, acabando frutales, cortando flores y lo más grave, con aparatos para exterminarlas.
Las abejas y otros polinizadores, como las mariposas, los murciélagos y los colibríes, se ven cada vez más amenazados por las gestiones  del ser humano, sostiene la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Y  creanlo o no,  sin polinización se acabará la vida…