Alta Tensión, TOP

Confidencias: ALTA TENSIÓN

Confidencias: ALTA TENSIÓN

 

 

 

 

 

ESTAFA EN CUARENTENA

El portal en línea ‘Shopping Colombia’, estafó a muchos colombianos en época de cuarentena al ofrecer artículos tecnológicos a unos precios de ganga. Las peticiones se reciben luego de consignar el 50 por ciento del costo. Luego reciben una llamada donde indican que por motivos de la pandemia no estaba autorizado el mensajero a recibir el dinero y por lo tanto deberían consignar el otro 50 por ciento para enviarles el producto.

Helio Armando Fernández, uno de los damnificados, dijo que «encontré la publicidad en Facebook, se veía supremamente legal la página y averigué Cámara de Comercio antes de hacer la compra».

Fernanda Riveros, abogada de 28 de las víctimas de Shipping Colombia dijo que están tomando las medidas respectivas para denunciar a los presuntos estafadores.

Las autoridades han guardado absoluto silencio en este caso de estafa masiva.

«TRIZAS» AL ACUERDO DE PAZ

El ministro de la Defensa Carlos Holmes Trujillo destapó las cartas del gobierno frente al acuerdo de paz que se firmó en la administración Santos. La revelación fue hecha cuando el ministro dijo en el Congreso: «Pidió a las Farc y a todos los partidos no cerrar la puerta a eventuales modificaciones del acuerdo».

Pero no se quedó corto cuando anunció:«Pensar que un texto pétreo pueda tener la virtud de haber interpretado en el momento en que se negoció todas las circunstancias nacionales hacia el futuro, en la práctica termina cerrándole posibilidades al entendimiento necesario para recuperar la convivencia y construir la paz».

Para expertos en materia de paz, señalaron que la intención del gobierno es modificar el acuerdo de tal manera que por fin puedan cumplir la promesa de volver  de «hacer trizas» el acuerdo de paz.

Margarita Cabello, ministra de Justicia¿LE QUEDÓ GRANDE EL CARGO?

Definitivamente la ministra de Justicia Margarita Leonor Cabello Blanco, «no dio la talla» para el cargo según la opinión de abogados litigantes. Señalaron que la titular del ministerio, no asume ninguna de sus responsabilidades sin antes de echarle la culpa a personas o entidades. Puso de ejemplo la crisis carcelaria donde se contagiaron los reclusos por la falta de una adecuada diligencia que permitiría prestarles la atención en materia médica y haber descongestionar las cárceles, pero todo lo hizo de manera lenta y las medidas nunca llegaron con la consecuencia de números presos muertos.  Los mismos abogados sostienen que la anterior ministra Gloria María Borrero, que fue revelada del cargo por falta de resultados, sin embargo según los juristas,  era superior a la actual ministra Margarita Leonor Cabello Blanco. La ministra ha responsabilizado de los reclamos que le hacen a la alcaldesa de Bogotá y al Consejo Superior de la Judicatura.

Nancy Patricia GutierrezPERSONAJE TÍPICO

Pero si en el ministerio de Justicia, llueve en el ministerio del Interior no escampa. Definitivamente el gobierno no nada con bolas en la designación de los más importantes cargos del país. Definitivamente Alicia Arango se ha convertido un personaje típico de la administración Duque de acuerdo con periodistas que cubre el Congreso de la República.

«Quisiera ir a las regiones, pero por vieja no puedo, porque qué tal que me dé el coronavirus, No me puedo mover porque me lo prohibieron»,dijo en el Congreso la funcionaria. Definitivamente el par de ministras están haciéndonos  quedar a los colombianos ante el mundo como retrasados mentales y eso que no tocamos a la canciller  sino,  es como  ponerle   «el moño» al gobierno.

CONTROVERTIDO NOMBRAMIENTO

Un nombramiento con toda clase de ribetes. La noticia causó estupor. Jorge Rodrigo Tovar Vélez, hijo del ex paramilitar «Jorge 40», comandante del Bloque Norte de las Autodefensas, es el nuevo Coordinador de Víctimas del Ministerio del Interior.

Siguiendo en ese orden, el próximo director de Bienestar Familiar será un descendiente de Garavito.

Tovar Vélez ha laborado desde hace varios meses en el gobierno Duque y lo han visto hasta entregando mercados. Trabajó en la Cámara de Representantes, fue contratista de la Organización Internacional para las Migraciones y laboró en temas turísticos.

No se necesita ser de la oposición para temerle a este nombramiento. Claro está que algunos dirán que las víctimas serán las que dejan las FARC, el ELN, las disidencias, el EPL y demás agrupaciones de izquierda.

La ministra dei Interior Alicia Arango en una intervención en el Congreso defendió el nombramiento de Jorge Rodrigo Tovar Vélez, hijo de «Jorge 40»  comandante del Bloque Norte de las Autodefensas  y dijo que no se echara para atrás, porque para ella no existe el delito de sangre.

 HOJA DE VIDA DE JORGE 40 EN WIKIPEDIA

Esto dice el famoso portal sobre el ex paramilitar que recobrará su libertad este año de pandemia.

«Rodrigo Tovar Pupo (Valledupar, 30 de octubre de 1950), alias Jorge 40, es un excomandante paramilitar colombiano, miembro de la Autodefensas Unidas de Colombia. Era el comandante del Bloque Norte, que operaba principalmente en los departamentos de Cesar, Magdalena, La Guajira, Atlántico y Santander y que es responsable de asesinatos, masacres y secuestros en dichos departamentos a lo largo de 12 años. ‘Jorge 40’ confesó alrededor de 600 crímenes mientras estuvo sometido al proceso de Justicia y Paz. Se desmovilizó junto con mil de sus hombres el 10 de marzo de 2006 dentro del proceso de desmovilización de paramilitares en Colombia. El 13 de mayo de 2008 fue extraditado a los Estados Unidos por el delito de narcotráfico. Saldrá de la cárcel en 2020».

 HISTORIA DE TERROR

«Jorge 40» –como era conocido y de cuyo apoyo hay varias versiones—comentaba que se alzó en armas por la actividad guerrillera en los años 90 en la costa Atlántica.

Comenzó vendiendoles armas a las Autodefensas y luego fue nombrado por Mancuso como comandante del Bloque Norte, con un acompañamiento de más de 5 mil hombres, con los cuales cometió innumerables masacres.

A su vez «Jorge 40» ,es hijo de un militar caucano llamado Jorge Tovar , quien fue enviado a Valledupar en comisión y terminò conociendo a quien sería su esposa y la madre de «Jorge 40».

 INFORME DE LA BBC

El prestigioso portal cuenta que «en febrero de 2000 fueron torturados, descuartizados y degollados más de 60 campesinos y muchos más tuvieron que huir y dejar sus pertenencias. Ocurrió en El Salado, en el departamento de Bolívar. Fue una las peores masacres paramilitares de la historia de Colombia.

Según consta en la sentencia de Justicia y Paz a Salvatore Mancuso, esa fue planificada por él, por «Jorge 40» y otro jefe paramilitar.

El 18 de abril de 2004 los hombres de «Jorge 40» ejecutaron una masacre en Bahía Portete, zona de rancherías de indígenas wayuu en la Alta Guajira, en el noreste del país. Según el libro «Guerras Recicladas», de María Teresa Ronderos, entraron «decapitando matronas, se robaron piedras sagradas, profanaron el cementerio y destrozaron en centro de salud».

«Y luego fueron casa por casa, matando a varias mujeres».

En 2005 «Jorge 40» fue condenado a 47 años de prisión por la masacre de 40 personas en Sitio Nuevo, departamento de Magdalena, en la madrugada del 22 de noviembre de 2000.

Al año siguiente fue sentenciado a 26 años por una veintena de homicidios cometidos entre 2004 y 2005 en el departamento del Atlántico.

«EN EL LUGAR EQUIVOCADO»

El portal relata que un caso que muestra cómo la violencia de las AUC casi no hallaba límites fue el ocurrido en marzo de 2000. Siete miembros del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía iban a realizar una exhumación que podía implicar a los paramilitares. Fueron capturados y asesinados.

Entre ellos estaba el odontólogo forense Jaime Elías Barros Ovalle, quien había sido amigo de la infancia de Tovar Pupo.

«Estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado», cuentan que dijo el paramilitar. «Jorge 40» fue condenado a 25 años de prisión por este crimen.

LA DEPRESIÓN

A diferencia de otros jefes paramilitares, dice BBC Mundo, «Jorge 40» no colaboró con la Justicia de Estados Unidos, que lo condenó por narcotráfico.

Algunos creen que podría tener que ver con su carácter voluble, su tendencia a caer en depresiones: que llegó a EE.UU. con la sensación de haber sido traicionado -no esperaba que Colombia aprobara su deportación- se encerró en sí mismo, en el silencio, como en cada ocasión que el ánimo se le desplomaba.

Aunque está acusado de traficar cientos de toneladas de cocaína, él siempre negó tener un vínculo directo con el narcotráfico. En una entrevista que concedió a Revista Semana en marzo de 2006 aseguró: «Puedo decirlo con la frente en alto: ¡yo no soy narcotraficante!».