Opinión

PARECE QUE FUE AYER.

PARECE QUE FUE AYER.

Fred Emiro Núñez Cruz

Director Asociación de Comunicadores Sociales.

En esta época, de  tiempos aciagos, cuando los medios juegan un papel determinante en la emoción, sentir y sensación del alma con estándares psicológicos y psiquiátricos devastadores, viene a mi mente el nacimiento de las frecuencias radiales universitarias que despertaron un sentir adverso en estaciones comerciales y varios contradictores, soñadores de riquezas, pobres  de pensamiento como necios de palabra e ideas.

Mi memoria me lleva al pretérito de  un día con tarde soleada, calles acudidas y transeúntes afanados cuando acompañé al hoy consolidado profesor Gerney Ríos González al despacho del Viceministro de Comunicaciones, Camilo Llinás Angulo, ubicado en el impenetrable edificio Murillo Toro, ubicado entre las carreras séptima y octava con calles doce y trece, para entonces se ingresaba con cita previa del funcionario a consultar.

Los nombres citados – Rodrigo Llorente Martínez, Julio Galeano Cruz, Jaime Forero Valdés y el compañero-camarada-Faustino García Cáceres, secretario del Colegio Nacional de Periodistas, son ciudadanos a los que debemos rendir homenaje por ser los inspiradores para que el gobierno diera vía libre para que la población universitaria manifestará sus ideales y fueran artífices en la construcción de una Colombia mejor informada.

Con el liderazgo del insistente e incisivo escritor y catedrático, Gerney Ríos González, armerita, hoy puedo afirmar que es lo mejor que le ha pasado al periodismo. «Para verdades, el tiempo», de no ser por estas  emisoras, que producen formidables contenidos, tendríamos que mantener apagados los radios y dispositivos que hoy se accionan para escucharlas.

Valió la pena secundar a este selecto grupo que dio tan duro golpe a la ignorancia radial, inicialmente con HUJT 106.9 FM; luego, para bien, vendrían la de la  Javeriana, Universidad Nacional, Universidad Distrital Francisco José de Caldas, y otras.

Yo tenía veinticuatro años cuando el sol naciente de la gélida Bogotá acogió las ondas sonoras del eco, repleto de cultura, cobrando vida en el dial otra gran opción. Definitivamente, Llinás es el rector y Gerney el dinamizador – gestor de la Radio universitaria para el desarrollo de la ciencia, tecnología, literatura, comunicaciones, arte e irradiación de la cultura según lo registraron los medios en 1982.