Hernando Perdomo Ch

Camilo Tovar

Tan arraigada como la fama de sus grandes arrozales, de su café, de sus aires musicales como el sanjuanero, así como sus bellezas naturales, para no citar sino unos pocos ítems, es en el Huila la tradición de las grandes voces que ese departamento le ha dado a la radiodifusión colombiana.

¿Qué hay tan particular en aquella región del país como para ser cuna de grandes voces que han calado hondamente en los grandes auditorios de la radio comercial, tanto en las emisoras musicales como en las deportivas?

La pregunta retoma vigencia a partir de la silenciosa despedida de uno de los últimos íconos de la radiodifusión deportiva nacional: Hernando Perdomo Chavarro, fallecido a mediados de la Semana Santa en Neiva a los 74 años, víctima de complicaciones cardíacas.

Su incursión en la vida de los micrófonos del deporte, específicamente del fútbol, se remonta al año 1963, cuando despegaba en Colombia una nueva época del balompié y «El Campeón» Carlos Arturo Rueda C. constituía el referente en la narración.

Tras una breve incursión por la Emisora Mariana, Perdomo atrajo la atención de Rueda, la voz mayor por décadas, quien después de escuchar al joven venido del Huila le brindó la oportunidad de aparecer progresivamente en la transmisión de los deportes.

«Este opita tiene que ser mi voz comercial», contaba Perdomo Che sobre un comentario que le hizo «El Campeón». La prometedora voz del aventurero corresponde a lo que en el futuro sería toda una tradición de grandes voces del Huila: Jairo Palomino Rubio, Fernando Calderón España, Fred Emiro Núñez Cruz, Edgar Artunduaga, entre otros de los muchos que llegando a Bogotá conquistaron a la audiencia nacional.

Hecho en la radio, Perdomo Ch fue creciendo a partir de su rol como voz comercial en los tiempos de oro de Todelar y posteriormente en Caracol, antes de consagrarse como relator deportivo, condición en la cual descolló principalmente en el fútbol y el baloncesto.

Su voz sonora, potente, cristalina, pero también matizada por una alegría que contagia, le mereció récords de sintonía, especialmente en El Campín, donde competía con verdaderos colosos como Pastor Londoño Pazos, Jairo Moncada, Jairo Alonso Vargas, Marco Antonio Bustos, Armando Moncada Campuzano y Francisco «Paché» Andrade.

Al apagarse una de las voces icónicas en la historia de la radio deportiva de Colombia, con el adiós a Hernando Perdomo Ch cae el telón de la época más brillante y más recordada en este medio.