Nota editorial: LA SALUD EN COLOMBIA
Es urgente reformar el sistema de salud que ha ocasionado millones de muertes en Colombia como consecuencia de la utilización de los dineros públicos para utilizarlo en intereses particulares o empresariales.
Los colombianos hemos sido objeto de toda clase de atropellos por parte de los «dueños» de la salud de Colombia que sin invertir recursos han logrado hacer grandes capitales que en buena parte son sacados al exterior.
La avaricia de quienes se habían acostumbrado que los gobiernos y el congreso de turno hacían lo que ellos ordenaban a cambio de unos cuantos «fajos de billetes», hoy se encuentran «asustados». No saben si van a perder la «gallinita de los huevos de oro», o como se han acostumbrado a dejar billonarias deudas a los hospitales y clínicas públicas y privadas.
La oposición en Colombia acostumbrada cuando era Gobierno de defraudar todos los sectores se oponen a una reforma por cuanto saben que ya no contarán con los recursos a los cuales los tenían acostumbrados los mercaderes de la salud.
Hoy los colombianos reclamamos un sector de la salud fuerte, que tenga un cubrimiento en la totalidad de los habitantes del país de manera efectiva y no de un simple «carnet como nos habían acostumbrado.
La salud en buena parte debe ser preventiva para evitar que las enfermedades graves se sigan multiplicando. La idea debe ser de buscar ser un país sano.
Llegó la hora de acabar con la «guachafita» que nos montó quienes nos han gobernado en los últimos años, unos verdaderos mercaderes de la corrupción.
Ojalá los anuncios realizados por el Gobierno que tuvo la valentía de abordar el tema de la salud salga adelante y no se deje presionar por una clase que quiere seguir dominando a pesar de no no tener el poder político del país.
La cantidad alarmante de dinero que se está moviendo para realizar campañas tendientes a lograr el miedo de la gente y de esta manera no tocar a los privilegiados con los recursos públicos que se han enriquecido con la muerte y el deterioro de la salud de los colombianos más vulnerables.
¡Basta ya! La muerte de los colombianos no puede seguir por la falta de atención médica, el suministro de tratamientos o medicamentos. Es hora de transformar la salud para que sea un servicio eficiente que contribuya a salvar vidas. Fue promesa del actual Gobierno y debe cumplirla a cabalidad.