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Raíces, desde Nuevitas: EVOCACIÓN A MUJERES DESCENDIENTES DE ÁFRICA EN EL CARIBE

La islita forma parte de los tres ballenatos donde hace muchos pero muchos anos existía un criadero natural de ostras.

 

 

Texto y fotos
Lázaro David Najarro Pujol
La mujer caribeña está entre las líneas temáticas del artista cubano de la plástica Oscar Silva Hechevarria , residente en la ciudad de Nuevitas, al norte de la provincia de Camagüey.
Atraído por las historias y leyendas sobre la trata negrera a través de Océano Atlántico entre los siglos XV y XIX, luego de la conquista de Cuba en 1492, Silva Hechevarria asumió el proyecto pictórico «Raíces».
Lo integran ocho acrílico sobre tela de una dimensión de 100 por 90 centímetros que atesora en la actualidad el Museo Municipal de Nuevitas, comarca donde se erigió hace más de 510 años la Villa de Santa María del Puerto del Príncipe, hoy Camagüey.
El curador de la muestra Roberto Figueredo Lechuga explicó que el artista se inspiró en las mujeres caribeñas, especialmente las cubanas de raíces africanas.
Según la leyenda a principios del siglo XIX, en el hábitat del islote Ballenato Mayor, frente a Punta de Guincho, en medio de la Bahía de Nuevitas, ancló un barco «negrero».
La islita forma parte de los Tres Ballenatos, donde hace muchos, pero muchos años existía un criadero natural de ostras, conocido por el Banco de las Perlas.
 Los «afortunados» (especialmente hombres jóvenes y fuertes), bajo el azote del látigos y las cadenas, «bajaron» del infecto barco «negrero» camino a la esclavitud.
Permanecieron varios días en Ballenato Mayor. Los mejores esclavos fueron llevados al Ballenato del Medio, «para ser entrenados como buzos para el Banco de Perlas».
El artista de la plástica Oscar Silva Hechevarria apuntó que los habitantes de los pueblos de África fueron víctimas de la trata negrera y «sin saber a ciencia cierta, ni de manera exacta la etnia de la que procedían llegó por así decirlo está raza a nuestro país, que al mezclarse con otros dentro de nuestro contexto histórico, ha contribuido en la formación de ese ser que somos hoy los cubanos.»
El apasionado y carismático creador tiene su casa (devenida taller de artes visuales), en el mismo centro histórico de la ciudad de Nuevitas.
«Raíces»
La mujer caribeña