La desarticulación de dos importantes redes de narcotráfico: «Los Camerusa» y «Los Yeyos». En total, más de 38 personas fueron capturadas en el marco de la «Operación Bogotá»
Rafael Camargo Vásquez
Bogotá, Colombia –
La Policía Metropolitana de Bogotá, en un esfuerzo conjunto con la Fiscalía General de la Nación, ha asestado un golpe significativo al crimen organizado con la desarticulación de dos importantes redes de narcotráfico: «Los Camerusa» y «Los Yeyos». En total, más de 38 personas fueron capturadas en el marco de la «Operación Bogotá», enfocada en combatir la venta de estupefacientes y armas de fuego en el sur de la capital.
«Los Camerusa»
Tras 11 meses de investigación, que incluyeron vigilancia, interceptaciones telefónicas y el trabajo de un agente encubierto, se logró desmantelar a «Los Camerusa». Esta banda utilizaba métodos ingeniosos para la distribución de drogas:
- Menudeo en zonas infantiles: Operaban cerca de colegios y parques, camuflando la droga en chalecos de pesas colocados sobre perros de razas potencialmente peligrosas.
- Fachada musical: Por las noches, algunos miembros actuaban como DJs en discotecas del barrio Restrepo, y también en municipios cercanos como Anapoima, Mesitas del Colegio e Ibagué, para vender sustancias alucinógenas, especialmente el peligroso «Tusibi» (una mezcla de sustancias que incluye ketamina).
Los operativos resultaron en la captura de 18 de sus integrantes, incluyendo a alias Andrea (distribuidora de marihuana y cocaína), alias Camilo – El Mono (segundo al mando), alias Poquebolas (principal distribuidor de «Tusibi»), alias Juan Carlos (proveedor de armas), y los abastecedores «Chaval» y «Camilin», este último también involucrado en préstamos «gota a gota».
«Los Yeyos»
La desarticulación de «Los Yeyos» fue producto de un año de investigación. Esta organización, liderada por alias Sandra (fundadora), «Marvin» (actualmente preso por homicidio) y alias Eliseo (con orden de captura por porte ilegal de armas), comercializaba estupefacientes presuntamente traídos del Meta, como marihuana, cocaína y «Tusibi». Sus puntos de venta incluían los parques La Joyita, Santa Inés y un casino en la localidad de San Cristóbal.
Para evadir a las autoridades, usaban diversas artimañas:
- Disfraces: Se movilizaban en bicicleta, ocultando la droga en carrieles o en una carretilla de venta de limones.
- Insospechado cómplice: Una de sus integrantes llegó a utilizar el coche de su hija de 9 meses para camuflar la droga y pasar desapercibida.
- Movilidad estratégica: Alias Eliseo utilizaba el transporte público para repartir la droga y eludir controles.
Entre los capturados de «Los Yeyos» se encuentran alias Brandon, «Jennifer» y «Miriam» (encargados de recepcionar el dinero), alias Balotelli, «Jackson» (un pensionado del Ejército en silla de ruedas) y «Eliseo» (distribuidores). En cuanto a seguridad y sicariatos, se identificaron a alias Lime, «Niño Malo», «Pampara», «Ramón» (de nacionalidad venezolana) y «Tyson» (preso por homicidio), además de alias Cucho (proveedor de armas).
El Peligro del «Tusibi»
El secretario de Seguridad, César Restrepo, destacó la preocupación por la distribución de «Tusibi», una sustancia que combina otras drogas, incluyendo ketamina, y que causa graves afectaciones a la salud. Restrepo advirtió que estas redes criminales utilizan los entornos de fiesta para «enquistarse» y financiar otras actividades delictivas como «paseos millonarios», hurtos, violencia sexual, homicidios y extorsiones.
Adicionalmente, se reveló que ambas organizaciones utilizaban armas de fuego para mantener el control territorial y estaban vinculadas a homicidios selectivos, habiéndose autodenominado en el pasado como «Gaitanistas del Chocó».
Con estas operaciones, las autoridades han logrado afectar las finanzas de estas redes criminales en más de 560 millones de pesos mensuales, debilitando significativamente su accionar delictivo y mejorando la seguridad de los ciudadanos en Bogotá.